Esta semana cientos de pájaros cantores han muerto al estrellarse contra los rascacielos de cristal de Nueva York. Audubon, una organización que se encarga de proteger a las aves y sus hábitats, ha denunciado la aparición de las aves muertas en las calles de la ciudad. 

La organización ha pedido a los propietarios de las torres del World Trade Center y otros rascacielos de la ciudad que atenúen las luces que iluminan los edificios por la noche y preparen las ventanas para reducir el número de choques de las aves.

226 aves muertas

Una voluntaria de Audubon en Nueva York, Melissa Breyer, colgó en Twitter imágenes de las aves muertas, y las contabilizó. Breyer contó hasta 226 pájaros que habían muerto a causa de haberse estrellado contra los edificios. En sus redes sociales explica que el descubrimiento ha sido "abrumador" y que "las aceras estaban literalmente cubiertas de pájaros".

Kaitlyn Parkins, directora de conservación y ciencia del grupo, ha explicado que la gran tormenta, el clima extraño y la gran cantidad de aves crearon la "combinación perfecta" para que se produjeran todas las colisiones, que son algo habitual en la ciudad, pero que esta semana han sobrepasado la media. 

Ayuda ciudadana 

Audubon ha pedido colaboración ciudadana para contabilizar la muerte de todas las aves. En sus redes sociales, pedían a los neoyorkinos que si encontraban pájaros en las aceras y calles informaran a dbird.org, y que en caso de que estuvieran heridos, les llevasen a Wild Bird Fund, una organización de rehabilitación de aves en Nueva York.