El coronavirus vuelve a Wuhan, ciudad origen de la COVID-19. La urbe china ha detectado tres nuevos casos locales, a los que hay que añadir cinco contagios asintomáticos (China diferencia entre infectados sintomáticos y asintomáticos), después de más de un año sin tener nuevos casos. Por eso, se ha anunciado una campaña de test masivos entre su población, de más de 11 millones de personas, para cribar e identificar el mayor número de casos posibles.

No se producían contagios en Wuhan desde junio de 2020, después de haber sido la ciudad en la que se registraron los primeros casos de COVID-19 en el mundo a finales de 2019, cuando aún se desconocía que estallaría una pandemia en todo el mundo.

Los test masivos en la ciudad céntrica de China no será la única medida que tomará el Gobierno para frenar posibles brotes, sino que también se han confinado de forma parcial el barrio de Zhuankou, una zona que las autoridades consideran de “riesgo medio”.

La vacunación y la experiencia, claves

A pesar de que la alerta es máxima de nuevo en Wuhan debido a la velocidad con la que se transmite la variante Delta, los expertos han querido tranquilizar indicando que la tasa de vacunación alcanzada en el país (aunque no hay datos oficiales) y la experiencia que ya tiene la ciudadanía para protegerse y proteger harán que los rebrotes no sean muy pronunciados.

La detección de casos locales en Wuhan no es única en China, sino que se están dando nuevos contagios en otras ciudades y provincias. En total, en las últimas 24 horas se han registrado 61 nuevos casos por transmisión local, de los cuales 45 pertenecen a la provincia oriental de Jiangsu.

Vuelven los confinamientos a China

Los repuntes y rebrotes han hecho que vuelvan las restricciones y los confinamientos a China. Así, en la capital Pekín se han hecho test masivo, se han aislado residencias y se han puesto en cuarentena a los contactos estrechos de los contagiados. Por su parte, en Zhuzhou, provincia de Hunan, en el centro del país, se ha confinado durante tres días a más de un millón de personas. “La situación sigue siendo sombría y complicada”, han manifestado desde el Gobierno local.

China no quiere que la pandemia se vuelva a descontrolar y está actuando con determinación allí donde detecta contagios locales, por mínimos que sean, como es el caso de Wuhan, donde entre sintomáticos y asintomáticos ‘sólo’ se han detectado ocho casos entre 11 millones de personas. La pandemia no ha terminado, tampoco en en su origen, en Wuhan.