La llegada de la pandemia elevó el protagonismo de las terrazas y los balcones. Ante la imposibilidad de salir a la calle debido al estricto confinamiento establecido en España, numerosos ciudadanos convirtieron estos espacios de los inmuebles en indispensables.

Y ahora, tanto empresas como algunas Administraciones pretenden devolverle ese protagonismo. Por ejemplo, los propietarios de viviendas en el País Vasco que reformen los edificios, tendrán que añadir terrazas o balcones si la estructura lo permite. En ese caso, recibirán una subvención de 5.000 euros por vivienda, ya que se han considerado como elementos imprescindibles para que una vivienda sea habitable. 

No computará como superficie útil

Entre las características que deberán tener, su espacio será de un mínimo de cuatro metros cuadrados con un fondo de 1,5 metros. Pero sin duda, uno de los aspectos más importantes es que no contará como superficie útil, algo que sí hacían hasta ahora, lo que provocó su reducción o supresión por parte de los propietarios o los promotores. 

Pablo García Astrain, director de Vivienda, Suelo y Arquitectura del País Vasco, explicó en El País los motivos que les han llevado a impulsar el nuevo decreto: "Antes de la pandemia ya estábamos trabajando en este concepto de habitabilidad exterior. Cuando llega la COVID lo que hacemos es dar un paso más allá, de forma que el decreto de habitabilidad, que originalmente solo buscaba fomentar los espacios exteriores no computando edificabilidad, equipara la obra nueva a la rehabilitación y exige terrazas o balcones, siempre que sea posible desde el punto de vista urbanístico".

Dificultad añadida

Sin embargo, añadir una terraza o un balón no es una tarea sencilla. Para empezar, hay que comprobar su viabilidad técnica. Según detalló en el citado medio el Consejo General de Colegios Oficiales de Aparejadores y Arquitectos Técnicos, "se está colocando un voladizo y, por lo tanto, una carga excéntrica donde no estaba prevista, por lo que es imprescindible observar la viabilidad técnica de la solución garantizando la seguridad de las personas. La instalación de estas terrazas, si son permanentes, puede requerir una actuación de refuerzo de la estructura". 

Posteriormente, se necesitan las licencias necesarias por parte de la Administración para comprobar si hay algún tipo de limitación urbanística. Asimismo, se debe contar con el acuerdo de los vecinos, puesto que se trata de una obra que afecta a la fachada y a la estructura de cada edificio. 

Muy demandado

El auge de los espacios exteriores ha sido predominante desde el comienzo de la pandemia. Debido al aislamiento, muchas de las personas que pudieron cambiar de casa empezaron a priorizar aquellas que contaran con grandes terrazas, consolidándose como el producto más demandado durante el pasado año 2020.