La nueva Ordenanza de Movilidad Sostenible (OMS) entrará en vigor este verano e incorporará algunas novedades. La principal será que los menores de 18 años que circulen por la ciudad de Madrid en bicicleta o patinete deberán llevar casco de forma obligatoria, igual que los ‘riders’ que repartan comida y mercancías en bicicletas y VMPs tendrán que llevar casco homologado obligación, según informa 20minutos. Hasta ahora, la ley solo obligaba usar caso a los menores de 15 años, con lo que el cambio solo afecta a los jóvenes de entre 16 y 18 años.

Uno de los objetivos de la nueva OMS, según recoge la propia norma, es “la protección del derecho fundamental a la vida y a la integridad física de las personas y de derecho constitucional a la salud de las personas”. De ahí que se haya apostado por esta medida, con la que se pretende lograr “la reducción de la siniestralidad vial, centrándose en los colectivos más vulnerables como los peatones y usuarios de los vehículos citados”.

¿Una medida desmesurada?

El portavoz de Pedalibre, Iñaki Diaz de Etura, ha criticado esta nueva norma, a la que ha calificado de “desmesurada”, porque “no está sustentada en ningún dato objetivo de accidentalidad”. Sin embargo, desde el área de Medio Ambiente y Movilidad, dirigida por Borja Carabante, sostienen que los accidentes de tráfico en los que están involucradas las bicicletas ha aumentado en la última década, desde los 340 de 2010 a los 921 de 2020.

Otro de los argumentos de Diaz de Etura para posicionarse en contra del uso obligatorio del casco es que, en general, “disuade el uso de la bicicleta” y “aún es más grave si se amplía la edad en jóvenes y adolescentes, dado que están en una edad crítica”. Así, este representante de los ciclistas advierte de que “ahora se usará menos Bicimad”, como se ha podido comprobar con el “estrepitoso” fracaso de un servicio público de bicicletas en Australia, “uno de los pocos países del mundo donde el casco es obligatorio para todas las edades”.

Con este punto de vista tampoco coincide el Ayuntamiento de Madrid, que asegura que el servicio municipal de bicis ha crecido “exponencialmente, sobre todo desde el año 2020”. Algo que “está ligado a la ampliación de BiciMad, que en 2020 se ha extendido como nunca, con 50 estaciones nuevas, y la disposición de 3.000 bicicletas en calle. A lo que hay que añadir otras 454 bicicletas de BiciMad Go”. También influye el desarrollo de la infraestructura ciclista, que ha pasado de tener unos 267 kilómetros en 2021 a los más de 730 kilómetros que sumaba esta red en 2020.