Hallan ‘El Unicornio’, el agujero negro más cercano a la Tierra
Se encuentra a 1.500 años luz, era desconocido hasta la fecha, y se ha apodado así porque es único. Es de los más pequeños registrados.
Es el que más cerca está y hasta ahora nadie se había percatado de su existencia. Pero ya no se puede esconder más, se ha encontrado el agujero negro más cercano a la Tierra, con tres veces la masa de nuestro sol, a unos 1.500 años luz. Estaba pasando desapercibido y un equipo de investigadores ha desvelado su posición.
Ha sido apodado como ‘El Unicornio’, un nombre propio de la literatura fantástica, aunque en este caso no es ciencia ficción. Se debe a que hasta el momento es único en su clase y no se conoce a otro como él. Además, estaba en la constelación de Monoceros, ‘El Unicornio’, por lo que el mote se adecuaba a la perfección.
Aunque pueda parecer enorme por decir que tiene aproximadamente tres veces la masa de nuestro sol, la realidad es que es uno de los más pequeños que se han registrado nunca. Es muy diminuto para ser un agujero negro.
Las características del agujero negro
Está situado a unos 1.500 años luz de la Tierra, dentro de la Vía Láctea, aunque hasta el momento se encontraba escondido a los ojos de la ciencia. Está acompañado por una estrella roja gigante, conectados por gravedad. Además, esta es culpable también de que se haya podido identificar su posición.
Los agujeros negros no se pueden ver, son tan oscuros para la vista y para cualquier herramienta utilizada por astrónomos que simplemente no pueden ser vistos. En este caso, sí se puede observar la estrella roja, con un sistema de telescopios dentro de un satélite de la NASA que se encarga de buscar planetas fuera de nuestro sistema solar.
¿Cómo fue el descubrimiento?
Para empezar, los hallazgos han sido publicados en Monthly Notices of the Royal Astronomical Society por varios investigadores. Aunque existían ya algunos datos, no se habían analizado correctamente, y de esa manera. Detectaron que había algo que no se podía ver orbitando al lado de la estrella roja, provocando que su luz cambiara de intensidad y apariencia en algunos puntos.
Estos notaron que algo tiraba de la gigante roja y cambiaba su forma, lo que se conoce como distorsión de las mareas, que sirve para ser conscientes de que algo afecta a la estrella. Una de las opciones manejadas era la de un agujero negro, pero tenía que ser muy pequeño y no había muchos antecedentes de que existiera alguno así. Con la velocidad de la misma, el periodo de órbita y la forma de distorsión, se halló la masa del agujero.
“Así como la gravedad de la Luna distorsiona los océanos de la Tierra, haciendo que los mares se abulten hacia la Luna y se alejen de ella, produciendo mareas altas, el agujero negro distorsiona la estrella en una forma similar a una pelota de fútbol con un eje más largo que el otro", explica en un comunicado Todd Thompson, coautor del estudio, presidente del departamento de astronomía de Ohio State.
Supone un refuerzo para aquellos que no se explicaban el motivo por el que no encontraban agujeros negros. Estos investigadores creyeron que era posible encontrar algunos tan pequeños y eso les llevó al ‘Unicornio’. Es todo un avance que apoya las teorías e hipótesis existentes en este campo.