A nadie le gusta estar en la cama enfermo. Por eso, uno de los mayores temores de la población respecto a las vacunas contra la COVID-19 es la reacción que pueda tener su cuerpo y los efectos adversos que se desarrollen. De ahí que las autoridades actualicen constantemente los síntomas más frecuentes para que las personas se queden más tranquilas. Así, la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) ha publicado en su ‘4º Informe de Farmacovigilancia sobre Vacunas COVID-19’ que los acontecimientos adversos de las vacunas más comunes son: fiebre, dolor en la zona de vacunación, cefalea, mareos, mialgia y artralgia.

Hasta el 21 de marzo de 2021, según el informe, se administraron en España 6.125.119 dosis de vacunas frente a la COVID-19, habiéndose recibido 11.182 notificaciones de efectos adversos, lo que correspondería a 183 notificaciones por cada 100.000 dosis administradas. El 84% fue comunicado por profesionales sanitarios y el 16% por ciudadanos. La mayoría de las notificaciones corresponden a personas de entre 18 y 65 años (93%) y mayoritariamente a mujeres (82%).

Pfizer/BioNTech

Hasta el 21 de marzo, se habían administrado 4.834.876 dosis de Comirnaty, mientras que ahora son ya 7.265.789, según los últimos datos de Sanidad. De las cuatro millones de personas vacunadas hasta mediados de marzo, se notificaron 8.447 casos de acontecimientos adversos: “La mayoría de las notificaciones corresponden a mujeres (83%) y a personas de entre 18 y 65 años (91%)”. 

Además de estos síntomas, se incluyó la inflamación extensa en el brazo donde se inyecta la vacuna como una nueva reacción adversa que puede aparecer tras la administración de Comirnaty, aunque suele ser leve y desaparecer a los pocos días. También se está evaluando la inflamación localizada en personas que han recibido previamente inyecciones de rellenos dérmicos en la cara, como el ácido hialurónico. “Esta inflamación se produce en el mismo lugar de la inyección de relleno recibida previamente, con escozor, inflamación de la cara y picor. En caso de confirmarse su relación con la vacuna, se actualizará la ficha técnica y prospecto”, especifica la AEMPS. por último, como el resto de vacunas, se estudia si puede aumentar el riesgo de padecer trombocitopenia inmune, pero hasta ahora no se ha confirmado una relación causal con este fármaco.

Moderna

Actualmente, se han inoculado 577.514 dosis de Moderna, pero hasta el 21 de marzo habían sido 304.715. En este periodo se notificaron 901 casos de efectos secundarios, que incluyen acontecimientos de corta duración y que no revisten gravedad en lactantes cuyas madres se habían vacunado con esta vacuna como, por ejemplo, diarrea, vómitos e irritabilidad. En general, los diez efectos adversos más comunes son similares a los detectados con la vacuna de Pfizer/BioNTech.

AstraZeneca

Esta es la vacuna más polémica de las tres que se están inoculando ahora mismo en España debido a los casos de trombosis con los que está relacionada. Hasta el 21 de marzo, se habían administrado 985.528 dosis de Vaxzevria y se registraron “5 casos de trombosis de senos venosos, dos de ellos con trombocitopenia asociada”. Además, uno de estos casos acabó en fallecimiento. “Ocurrieron dentro de los primeros 14 días tras la vacunación, y la mayoría de ellos en mujeres de hasta 55 años”, especifica la AEMPS. A fecha del 9 de abril, se han administrado 2.388.522 dosis de esta vacuna.

La AEMPS recuerda en el informe que “no se considera que la administración de esta vacuna produzca un aumento del riesgo global de acontecimientos trombóticos”. Sin embargo, muy raramente se han presentado casos de trombosis de senos venosos cerebrales que pueden acompañarse de niveles bajos de plaquetas, que actualmente están en investigación. Además, se incluirán las reacciones alérgicas de anafilaxia e hipersensibilidad como reacciones adversas conocidas en la ficha técnica y el prospecto de esta vacuna. Por lo demás, los efectos más comunes son iguales que los otros dos fármacos.