Una de las ciudades con mayor riqueza cultural de España es sin duda Toledo. Ahora, durante las obras de restauración de una parte de la muralla medieval del Paseo de Cabestreros, se ha descubierto un tramo de muralla Omeya de unos 30 metros de longitud y tres nuevas torres que se encontraban ocultas.

Milagros Tolón, alcaldesa de la ciudad, anunció el pasado martes este notable hallazgo y señaló que se va a proteger y "quedará integrada en la actual fortificación medieval datada entre los siglos X-XI. La ciudad sorprende cada vez más desde el punto de vista arqueológico e histórico. Toledo es un tesoro". 

La construcción

La regidora señaló que se instalarán señales para delimitar la nueva muralla y ofreció detalles sobre la construcción: "Se nota que es Omeya porque los sillares no tienen argamasa, son sillares que están de una forma lateral y otros horizontal".

También se ha documentado la presencia de un torreón de planta rectangular. Según detalló el Ministerio de Cultura y Deporte, "a partir de este primer hallazgo e, incorporando los estudios de Arqueología de la Arquitectura y análisis arqueométricos, se ha podido detectar cómo, embutida en fases posteriores, existen dos torres más que fueron amortizadas por construcciones modernas, principalmente por la construcción del Hospital de Santiago".

Podría haber más tramos

"Este conjunto de estructuras, en total tres nuevas torres y el tramo de muralla, pertenecen a las obras de Al-Hizam construido por el califa Abderramán III en Toledo en el primer tercio del siglo X", añadió el ministerio en su nota de prensa.

Asimismo, las autoridades recalcaron la importancia del hallazgo: "Es de gran importancia, ya que, por primera vez, se ha podido documentar arqueológicamente el cierre suroriental de esta área palatina de los Omeyas en la ciudad de Toledo. Según los expertos pueden existir más tramos de este recinto que, hasta la fecha, no han podido ser encuadrados cronológicamente".