Un instrumento de hace 18.000 años es tocado por primera vez
Un músico francés ha sido capaz de emitir notas con el objeto encontrado en la cueva de Marsoulas (Francia) hace casi cien años.
Una caracola encontrada en una cueva francesa hace casi cien años se ha convertido en uno de los instrumentos de viento más antiguo del mundo. Durante un inventario, los científicos se dieron cuenta de que el objeto tenía unas perforaciones no casuales y acudieron a un músico de viento, quien ha conseguido emitir sonidos.
La caracola fue encontrada en 1931 en la cueva de Marsoulas, la primera gruta ornamentada descubierta en los Pirineos, pero no ha sido hasta ahora cuando los científicos del Museo de Toulouse la han reexaminado y han descubierto un orificio en la punta de la concha de un diámetro de 3,5 centímetros. Una tomografía ha mostrado que se habían hecho cortes en el comienzo de una de las espirales del objeto.
Los investigadores, pertenecientes al Centro Nacional de Investigaciones Científicas de Francia, el Museo de Toulouse, la Universidad de Toulouse-Jean Jaurès y el Museo Quai Branly-Jacques Chirac, pidieron la ayuda de un músico de viento, que logró producir tres sonidos similares a las notas do, do sostenido y re.
El objeto mide 31 centímetros de longitud y 18 de diámetro y pertenece a la especie “Charonia Lampas” y, tras la investigación publicada en la revista “Science Advances”, se ha determinado como uno de los instrumentos de viento más antiguo, pero lejos de los 35.000 años de antigüedad datados en unas flautas encontradas en Alemania.
Los científicos intuyen que a la caracola se le puso un molde para ser tocada, ya que el orificio era irregular y estaba cubierto por un revestimiento orgánico. En declaraciones a EFE la autora principal de la investigación, Carole Fritz, indicó que "es un descubrimiento muy importante porque va a demostrar que en el Paleolítico se hacía música con objetos transformado además de las flautas".