Un animal marino de Ibiza, clave para el prometedor antiviral español contra la COVID-19
Su nombre es ascidiacea y ha sido clave a la hora de desarrollar un poderoso antiviral, por científicos españoles, para combatir contra el coronavirus.
La empresa española PharmaMar ha creado y desarrollado un fármaco antiviral que, según se ha podido demostrar, es capaz de disminuir en un 99% las cargas virales causadas por el coronavirus, algo conseguido hasta el momento en el pulmón de los animales tratados.
La revista Science ha sido la encargada de publicar los resultados de los experimentos realizados en el laboratorio con este medicamento llamado plitidepsina. Aunque en el artículo se hacen públicos los resultados de la investigación preclínica, realmente la compañía española ya se encuentra inmersa en los ensayos clínicos y está negociando el comienzo de la fase III.
El curioso origen del antiviral, un animal marino
Para haber podido desarrollar la plitidepsina, PharmaMar ha utilizado un animal marino denominado ascidiacea, perteneciente al subfilo urochordata. El compuesto necesario se extrae de esta tulipa marina, y se distribuye por todo el planeta.
Normalmente se puede encontrar en rocas o conchas, donde permanece de manera fija, es decir, son sésiles. Se calcula que existen unas 2.300 especies y de diferentes tipos, ya sea solitarias, compuestas o sociales.
Para este caso concreto, para la creación del antiviral, el organismo marino utilizado ha sido la ascidia Aplidium albicans, encontrada en una bahía de las Islas Baleares. A partir de ella, todo se obtiene por síntesis en un laboratorio.
¿Qué se sabe hasta el momento de la plitidepsina?
Aparte de lo ya comentado, su nombre comercial es Aplidin y ya ha sido aprobado por la agencia reguladora de Australia para el tratamiento oncológico del mieloma múltiple y para luchar contra el coronavirus. En lo segundo, lo que hace es bloquear la proteína eEF1A, presente en las células humanas, que es utilizada por el virus para reproducirse por el organismo e ir a más células.
Según el artículo mencionado, este fármaco ha demostrado tener una fuerte potencia antiviral, logrando una reducción de la replicación viral en los animales con los que se ha ensayado y a través de estudios in vitro.
También ha sido probado en humanos en la fase II de los ensayos clínicos, de las cuatro que hay en total. En octubre de 2020 se comunicó que de momento con los ensayos se había logrado el objetivo primario de seguridad y el secundario de eficacia, es decir, que la seguridad del tratamiento es muy buena y que actúa contra el coronavirus.
Ahora se encuentra en negociaciones con las autoridades sanitarias de España y Reino Unido, para poder terminar el diseño de los ensayos clínicos de la fase III con una alta participación de pacientes y recibir su colaboración.