CORONAVIRUS

China vuelve a levantar las 'arcas de Noé'

Los rebrotes en el país donde se detectó por primera vez el coronavirus han llevado a volver a levantar hospitales de campaña para atender a los pacientes.

China vuelve a levantar las 'arcas de Noé'
STR AFP

Un año después de las famosas imágenes de los obreros construyendo dos hospitales de campaña en China para atender a los pacientes de coronavirus, la historia vuelve a repetirse en el país asiático.

Durante los últimos días se han producido varios rebrotes de la enfermedad e, incluso, ha fallecido una persona por coronavirus por primera vez en ocho meses. Por ello, las autoridades han decidido volver a construir los hospitales ‘Arca de Noé’. Estos centros de campaña, cuya realidad más parecida en España podría ser el hospital de Ifema, ya están siendo montados para atender a los pacientes enfermos.

Actualmente se encuentran confinadas más de 20 millones de personas tras producirse un aumento de los contagios en las provincias de Hebei y Heilongjiang. En el día de hoy se han producido 130 nuevas infecciones, mientras que ayer se igualó la cifra más alta desde el 2 de marzo de 2020, con 144 contagios.

Por ello, el Gobierno chino mandó una advertencia para que se iniciase la construcción de hospitales ‘Arca de Noé’. Durante el día de hoy se ha terminado de construir un centro que acogerá, en la ciudad de Nangong, 6.500 habitaciones, aunque por el momento solo están terminadas 1.500. También en Shijiazhuang han terminado de edificar 1.000 estancias, aunque les quedan otras 2.000.

La Comisión Nacional de Salud achaca estos nuevos contagios al exterior, bien mediante los productos importados o por el personal que los traía. “La situación es difícil de manejar”, reconocen.

Construcción de las ‘Arcas de Noé’

La clave para entender cómo consiguen levantar hospitales tan rápido reside en que las estructuras son prefabricadas, tal y como resalta el catedrático de Arquitectura en la Universidad Europea, José Luis Esteban Penelas. “Es una estructura metálica, ensamblada y atornillada. Todo está hecho en módulos: tuberías, habitaciones e incluso las vías”.

Además, otra de las claves, además de la alta cualificación y experiencia de unos obreros que trabajan en tres turnos sin descanso durante las 24 horas del día, es que el terreno elegido para la construcción es llano y amplio, de tal manera que no hace falta levantar más de una planta, “lo que supone una menor complejidad”.