Una cueva de la isla indonesia de Célebes ha permitido descubrir la obra de arte figurativo más antigua de la historia. Se trata de un jabalí verrugoso con unas medidas de 136 centímetros de largo por 54 de alto que fue pintado hace más de 45.500 años.

Tal y como desvela la revista Science, el hallazgo ha sido realizado por el arqueólogo Adam Brumm y un equipo de científicos de la Universidad Griffith (Australia). El artículo asegura que cerca del animal hay dibujados otros dos cerdos menos completos que parecen enfrentarse.

"Estos nuevos descubrimientos añaden peso a la opinión de que las primeras tradiciones modernas del arte rupestre probablemente no surgieron en la Europa de la edad de hielo, como se creyó durante mucho tiempo, sino en algún momento anterior fuera de esta zona, tal vez en algún lugar de Asia o África, donde nuestra especie evolucionó", asegura Brumm.

Primeros en acceder a la zona

Tanto el experto como su equipo fueron los primeros occidentales en visitar la zona pese a estar cerca de Makassar, la ciudad más grande de la región: "Los lugareños dicen que antes de nosotros nadie distinto a ellos había entrado a estas cuevas". La anterior representación más antigua conocida hasta la fecha era una escena de caza de hace 43.900 años, descubierta igualmente por Brumm en una cueva de la misma isla. 

Fechada con series de uranio

Según detallan los investigadores, la pintura muestra la evidencia más temprana de humanos en la isla de Célebes: "El hallazgo respalda la hipótesis de que las primeras poblaciones de Homo sapiens en asentarse en esta zona de Indonesia crearon representaciones artísticas de animales y escenas narrativas como parte de su cultura".

Para poder conocer la antigüedad de los dibujos, se utilizó una técnica denominada series de uranio. Con este método, no se fecha la pintura en sí, sino los procesos asociados a la actividad artística.