El coronavirus ha perdido la batalla contra un bebé recién nacido en Valencia, que tras 70 días en la UCI ha logrado acabar con la enfermedad que había contraído al poco de que su madre diera a luz. Ha llegado a estar en estado crítico, en la unidad de Cuidados Intensivos pediátrica del Hospital Vithas 9 de Octubre, pero ha recibido finalmente el alta hospitalaria.

El menor nació con normalidad, en perfectas condiciones y sin ningún contratiempo. Sin embargo, al llegar a su casa con su madre, contrajo la enfermedad porque su hermano estaba contagiado de manera asintomática. A los nueve días, tuvo que regresar al hospital.

Ante el empeoramiento progresivo, sus padres, Cristina y José, lo llevaron a urgencias, desde donde se optó por un traslado a la UCI. Fue allí donde las pruebas confirmaron que efectivamente tenía el coronavirus, algo poco frecuente y casi excepcional a la hora de contraer la enfermedad, sobre todo teniendo apenas días de vida.

Totalmente recuperado tras momentos de angustia

Según ha informado el hospital en un comunicado, Petru, como se llama el bebé, se encuentra “completamente recuperado” tras esos 70 días que ha tenido que estar ingresado, y su salida del centro sanitario ha sido momento “muy emotivo”, ya con el alta hospitalaria.

No obstante, hasta que finalmente se pudo confirmar el negativo, la situación no fue nada agradable. Petru ingresó con problemas respiratorios y dificultad para comer, y sus padres solo podían verlo por videollamada. Todo lo que ha sufrido ha provocado que la recuperación y rehabilitación fuera más lenta, por haber nacido unos días antes solamente.

Una marcha del hospital por todo lo alto

Aunque el pequeño no se ha enterado de nada, porque ha salido del centro dormido, todo el personal le ha dedicado una ovación y se ha despedido de Petru haciendo un pasillo y ofreciéndole un momento lleno de aplausos y cariño.

Su madre se ha mostrado a la salida muy agradecida con el trato recibido, a la vez que lloraba de emoción por todo lo vivido. “Jamás olvidaremos la solidaridad y las muestras de cariño demostrado por todo el centro hospitalario. Me he sentido muy apoyada en todo momento por todo el personal. Gracias de corazón”, ha declarado.

Ahora le toca vivir a Petru sus primeros momentos de su vida, ya con normalidad, también con su padre y sus hermanos. Sin duda, un caso que no ha pasado desapercibido, ya que los principales infectados suelen ser pacientes con mayor edad.