Las Úrsidas son estrellas fugaces que caen a la Tierra a finales de año. Por lo tanto, se convierten en un espectáculo astronómico habitual de las fiestas de Navidad que, en 2020, ha coincidido con la Gran Conjunción entre Júpiter y Saturno, producida durante el día de ayer, en un suceso que no ocurría desde 1623, según los expertos.

La lluvia de meteoros se viene produciendo desde el 17 de diciembre y se prolongará hasta el día 26. Sin embargo, la noche del 22 al 23 de diciembre será cuando más cantidad de estrellas se puedan percibir en el cielo, ya que según la Organización Internacional de Meteoro caerán 10 estrellas cada hora.

La oscuridad es el mejor amigo de la mayoría de espectáculos astronómicos y, en este caso, no es excepción. Por lo tanto, para visualizar las Úrsidas, los especialistas recomiendan acudir a un sitio oscuro. Las estrellas podrán verse mejor en las horas más próximas al amanecer, ya que al haberse ocultado la luna la oscuridad del cielo será mayor, aunque será entre las 02:00 y las 04:00 cuando la frecuencia sea superior.

Procedencia

Las Úrsidas se producen en la Osa Menor, tal y como etimológicamente deja entrever el nombre del acontecimiento astronómico. Su descubridor fue el científico William F. Denning, aunque no hay estudios certificados hasta mediados del siglo XX.

En la actualidad hay establecida una relación directa con el cometa 8P/Tuttle, que da la vuelta al sol cada 14 años. Los fragmentos del cometa y el polvo que desprende en su estela son los causantes de las Úrsidas. El nombre del cometa toma nombre del astrónomo Horace Tuttle, que fue su descubierto en 1858.