Dicen que los niños y los bebés son prácticamente inmunes al coronavirus y muchos individuos relacionan la enfermedad con las personas mayores. Pero, cada día se conocen multitud de casos de personas jóvenes que han sufrido de forma grave la COVID-19 e incluso otras que han muerto.

La historia de Jorgito, contada en Informativos Telecinco, puede cambiar la opinión de aquellos que piensan que los más pequeños no pueden contagiarse de coronavirus. Este bebe nació en el Hospital Nacional Edgardo Rebagliati de Perú en plena pandemia, el pasado 15 de junio. Llegó al mundo demasiado pronto, con tan solo seis meses, y un peso de 580 gramos, demasiado poco para un recién nacido.

Un bebé prematuro y con la COVID-19

Por si fuera poco, Jorgito nació con la enfermedad de la COVID-19, ya que su madre se contagió durante el embarazo y el virus consiguió alojarse en su pequeño cuerpo. Al nacer, el pequeño estuvo luchando por la vida durante 31 días en la Unidad de Ventilación y otros 45 días en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) Neonatal.

Vuelve a casa cuatro meses después

Cuatro meses después de su nacimiento, Jorgito puede presumir de ser el paciente más joven del mundo en recuperase de la COVID-19. Y no solo eso, sino que ha logrado sobrevivir con tan solo 23 semanas de gestación y un malicioso virus atacando su organismo.

Ahora, el bebé se marcha a casa totalmente recuperado con 2 kilos 268 gramos y 42 centímetros de altura. “El paciente evoluciona favorablemente, ha sido dado de alta para continuar con su recuperación en casa. Hace unas semanas fue operado de una retinopatía y tuvo una evolución favorable”, han contado desde el hospital al diario 'El Peruano’.

Un milagro

La madre del bebé, de 27 años, cuenta para el mismo medio la promesa que le hizo a su hijo nada más dar a luz: “Hemos cumplido la primera promesa que nos hicimos cuando nos conocimos mi hijo y yo, que lo esperaría afuera recuperado. Es un sueño tenerlo cerca. Él no lo ha tenido fácil, es muy valiente, quiso vivir y aquí estamos juntos como lo prometimos”.

“Es un milagro. Jorgito es un símbolo de amor y de esperanza, pero sobre todo de fe”, ha dicho la madre del pequeño para Telecinco.