La pandemia del coronavirus se ha cobrado la vida de casi un millón de personas desde su aparición a principios del presente año. Su expansión desde China hasta todo el mundo ha traído consigo crisis económicas y sanitarias.

Durante los meses más duros, los sanitarios estuvieron expuestos al virus cuando apenas se conocía mucho sobre él. Su encomiable trabajo para tratar de recuperar a los pacientes, mientras el resto de población debía permanecer en casa para evitar más contagios, ha sido reconocido en numerosos homenajes.

Sin embargo, uno de ellos ocurrido en Wuhan ha terminado en tragedia, tras la muerte de una enfermera y su marido. Ambos acudieron a un espectáculo celebrado en un teatro local y que tenía como fin homenajear a aquellos que estuvieron en la primera línea de batalla ante el virus. La sanitaria trabajaba, según Daily Mail, en el hospital Wuhan Tingji.

Cuando el espectáculo estaba cerca de terminar, el niño de cuatro años se deslizó hacia abajo desde el asiento. Los padres, al intentar rescatar al niño, quedaron atrapados y fueron aplastados por las sillas giratorias del Han Show Theatre. El joven consiguió sobrevivir tras caer en una red de seguridad que había debajo.

Indignación en redes sociales

El incidente se produjo el 6 de septiembre, pero no ha sido hasta ahora cuando las autoridades locales han confirmado el suceso, algo que ha generado un gran malestar en internet.

Hace unos días un usuario de Weibo, que aseguraba ser amigo de las víctimas, sacó a la luz lo sucedido. "Quería saber por qué sucedió el accidente, pero ahora estoy más preocupadp por cómo se informó después de tantos días. ¿Qué estaban haciendo los medios?", se pregunta un usuario de la red social.

Algunos de los asientos de este teatro no son fijos, sino que se mueven con el fin de brindar a los usuarios una mejor visión del escenario. Un motivo por el que se queja otro de los usuarios. "Las cosas de alta tecnología son buenas, pero las cuestiones de seguridad deben considerarse cuidadosamente".