Durante meses la Región de Murcia fue una de las comunidades que mejor pudo contener al coronavirus en sus compases iniciales de expansión. Con el Estado de Alarma vigente en España, la región murciana registró el 25 de marzo su peor cifra de contagios, con 118.

Sin embargo, desde mediados de agosto y especialmente con la entrada de septiembre la dinámica marca una tendencia al alta que no para de crecer. En el último día, la Consejería de Salud de Murcia ha confirmado 499 nuevos positivos correspondientes al día de ayer, por lo que el total de casos detectados por PCR asciende a 12.608. En el día de hoy se ha sumado una muerte más, la de una mujer de 86 años en Lorca, y la cifra alcanza las 179.

De entre estos nuevos casos, la mayoría corresponden a Murcia, con 192. Más lejos quedan el resto de municipios afectados, como Lorca con 52, Cartagena con 29, Jumilla con 25 o Alcantarilla con 21. En total hay 6.464 casos activos en la comunidad.

Evolución de las hospitalizaciones

Si bien es cierto que la presión hospitalaria no llegó a ser muy fuerte en Murcia en los meses de marzo y abril, la realidad es que a día hoy las cifras de ingresos en la región ya superan los de aquellos días. El Servicio de Epidemiología de la región cifra en 330 las personas hospitalizadas, de las cuáles 58 están en UCI.

Según el informe diario del ministerio de Sanidad, siendo el más reciente el publicado el lunes, la región murciana tiene un porcentaje de camas ocupadas del 10%, ligeramente por encima de la media española. En el último día ingresaron 26 personas con coronavirus en los hospitales de la comunidad.

El casco urbano de Lorca, en fase 1

Los datos epidemiológicos de la zona han hecho que se tenga que dar varios pasos atrás en lo que a medidas se refiere, por lo que desde ayer el casco urbano de la ciudad de Lorca vuelve a entrar en la fase 1 flexibilizada. Este municipio, en la última semana, alcanzó una incidencia acumulada de 474,6 casos por 100.000 habitantes.

Esta medida afectará a las cerca de 60.000 personas que habitan en el casco urbano, mientras que las pedanías de alrededor seguirán con las restricciones que tenían hasta ahora al presentar una incidencia menor.