Este pasado viernes, el ministro de Sanidad, Salvador Illa, anunció que España formaría parte del ensayo clínico de la vacuna Ad26 desarrollada por Johnson & Johnson. En él participarán 190 personas de dos grupos de edad: de 18 a 55 y mayores de 65.

Antonio Fernández, director de Relaciones Gubernamentales de Janssen España, filial de Johnson & Johnson, ha dado más detalles de lo que será este ensayo en fase 2 en una charla con el programa Hora 25 de la Cadena SER. En primer lugar, enumera tres motivos para elegir España para el ensayo: la capacidad de investigación de España, "es el país que hace más investigación clínica por detrás de EEUU"; la presencia de buenos investigadores clínicos en los centros sanitarios españoles, "con una gran reputación dentro y fuera de España"; y la tercera, una "buena comunicación y el soporte de la Agencia Española del medicamento".

Así deben ser los candidatos

Para los voluntarios en el rango de edad de 18 a 55 años, señala Antonio Fernández, "el único requisito es que sean personas saludables y que no tengan enfermedades que puedan asociarse al aumento de la gravedad de COVID-19". Respecto a los mayores de 65 años, lo destaca de forma especial, ya que "es el tipo de población que en muchos ensayos se excluye. Aquí el criterio es que pueden ser pacientes que sí tienen enfermedades, pero que estén en situación estable", señala.

¿Cómo funciona la vacuna?

El director de Relaciones Gubernamentales de Jannsen España explica de forma detallada el significado de inocular una vacuna. "Cuando vacunamos a una persona le estamos dando algo para formar a su sistema inmunológico para que aprenda a defenderse de la agresión exterior, del virus".

Así, una vez el organismo aprende a defenderse, "hay una primera línea de defensa, que son los anticuerpos neutralizantes. Lo marcan y lo neutralizan. Hay una segunda línea de ataque, la respuesta celular, que son los linfocitos que se encargan de matar al virus, para ello hay que instruirlos y que sepan cómo hacerlo. Por último, una tercera línea: unas células que se acuerdan de qué pinta tenía el virus. La vacuna ideal debe tener estas tres cosas: crear anticuerpos, crear células que luchen contra el virus y tiene que crear memoria. Los datos que tenemos es que hasta la fecha hace las tres cosas", asegura.

Una vacuna que, "si las autoridades reguladoras lo aprueban, podría empezar a distribuirse a principios de enero de 2021". Respecto a la inmunidad, comenta que es algo que depende de "factores de cada individuo, de las características de la vacuna y de los cambios que pueda sufrir el virus".

Varias dosis

Sobre el método de vacunación, Antonio Fernández dice que habrá un cambio en esta fase dos respecto a la primera, ya que se probará "lo que ocurre si usamos más de una dosis. Sabemos que una dosis es eficaz y ahora queremos mejorar el conocimiento. Queremos saber cuál es el intervalo en el que nos podemos mover, cuál es la cantidad más pequeña de dosis que podemos dar y es eficaz y a partir de qué dosis no merece la pena porque no tienes una eficacia añadida".

Una de las respuestas que más pide la población es el precio que tendría la vacuna, a lo que Jannsen España asegura que van a suministrar "a precio de coste. Johnson & Johnson no va a ganar dinero con esta vacuna cuando se utilice en situación de emergencia pandémica". Además, asegura que no solo esta posible vacuna va a ser suficiente, sino que "vamos a necesitar más".

"A finales de 2021 deberíamos haber vacunado un porcentaje importante de las poblaciones prioritarias: profesionales sanitarios y todas las poblaciones vulnerables", afirma.

Por último, lanza un mensaje para los antivacunas. "El ejemplo de un mundo sin vacunas lo tenemos con esta crisis: de confinamiento, con mascarillas, distancia social, personas en las UCI, funerales, este es un mundo sin vacunas".