La transmisión del coronavirus puede darse a través de aerosoles, que pueden permanecer en el aire durante unos segundos y provocar así el contagio, tal y como han informado ya varios científicos. A ello, añaden que los espacios interiores son más peligrosos que los exteriores, pues es más fácil que se contraiga el virus al estar concentrado en un espacio.

José Luis Jiménez, profesor de la Universidad de Colorado, concedía una entrevista a Antena 3 Noticias para hablar de esta propagación del virus, así como explicar a qué se debe y qué se puede hacer para evitarlo.

El rastreo muestra que es más probable contagiarse en el interior

El profesor de la Universidad de Colorado señala que es recomendable llevar a cabo actividades en lugares abiertos, pues incluso el rastreo de contactos “nos muestra que es 20 veces más probable contagiarse en el interior que en el exterior”. Como ejemplo, señalaba que en más de 1.000 brotes, cuando una persona infecta a muchas, solo una o dos de ellas se encuentran en un espacio abierto.

“Lo único que hace el contagio casi imposible es estar afuera, con mascarilla y respetando la distancia”, apuntaba el profesor, quien además, propone para llevar a cabo las clases presenciales de los niños y niñas de los colegios: “Hacer parcelas en los parques para dar las clases allí siempre que sea posible. Es muy importante que los niños lleven mascarilla también”.

¿Qué se debe evitar?

En el caso de necesitar entrar en un espacio cerrado, José Luis Jiménez, da seis claves para evitar el contagio: “Si no se respeta la distancia, si es mucho tiempo, si hay mucha gente, si hay poca ventilación, si hay gente sin mascarillas o si que lleva las mascarillas mal ajustadas y si la gente habla, y sobre todo si canta o grita”.

A ello, cabe añadir una buena ventilación para poder filtrar el aire mediante la apertura de ventanas y medir el CO2 para comprobar en qué zonas es peor la ventilación y actuar rápidamente en caso de que esta sea mala.

En la OMS, en contra de la teoría de transmisión por aerosoles

El profesor Jiménez señalaba directamente hacia la Organización Mundial de la Salud (OMS), donde, como aseguraba: “Por una mezcla de soberbia y de incompetencia científica y por miedo a las consecuencias se niegan a admitirlo [transmisión de aerosoles]”. Calificaba esta acción como un “error garrafal”, pues admitía que se trata de una evidencia abrumadora la transmisión por aerosoles.

“Esto de las gotículas es una tradición de hace años pero no tiene una evidencia fuerte y es un castillo de naipes que no se sostiene”, añadía acerca del modo de transmisión del coronavirus que la OMS piensa que actúa como principal medio de infección.

La transmisión por el aire no es tan sencilla

Ante una pregunta realizada por los compañeros de Antena 3 acerca de la efectividad de la transmisión de la COVID-19 por medio del aire, el profesor apuntaba que: “No es un virus muy contagioso, como sí lo es el sarampión, y por eso se confunde la OMS. De alguna manera piensan que si va por el aire tiene que ser muy contagioso. Esto no tiene razón de ser y la mayoría de la gente que convive con alguien infectado no se contagia. Esto es el talón de Aquiles del virus y como lo podemos derrotar”.