El coronavirus cada vez afecta a una franja de edad más baja en España. En cada comparecencia ante los medios de comunicación, Fernando Simón destaca que los nuevos contagios tienen, en su mayoría un denominador común: una edad media cada vez más baja.

De los cerca de 60 años al principio de la pandemia a los 40 en las últimas semanas. Aunque muchos de los más jóvenes pasa la enfermedad como asintomáticos o de una forma más leve, también ha casos en los que la gravedad ha requerido de ingresos en hospitales y Unidades de Cuidados Intensivos.

Es el caso, por ejemplo, de Cinthya, una joven de 27 que, pese a no tener patologías previas, sufrió la enfermedad de forma grave y tuvo que que ser hospitalizada en el Hospital Gregorio Marañón de Madrid. "A los cuatro días me que ingresaron tuve que ir a la UCI porque se me complicó un poco", relata. Cinthya, en sus primeros días de enfermedad, presentaba "fiebre alta, náuseas y dolor de cabeza".

"Manda un mensaje a tus padres, vamos a UCI"

Este fue el mensaje que recibió Carlos, de 38 años, días después de ser ingresado por culpa del coronavirus. "Me dijeron: manda un mensaje a tus padres y amigos, diles que te bajamos a la UCI", y allí me mandaron, tras "sedarme y ponerme boca abajo en la cama".

Llegó a pensar que no lo contaría, tras cuatro semanas en la UCI. "Estoy aquí de milagro, debido al virus tuve una cefalitis (inflamación en la cabeza)".

El hecho de recibir el alta no significa que se pueda volver exactamente a como se estaba antes. Chis todavía tiene algunas secuelas pese a estar fuera del hospital desde abril. "Se te duermen los brazos y algunos dedos del pie no los sientes". Pero, sobre todo, lo que más le preocupa es uno de sus pulmones, que sigue inflamado.