Nick Cordero necesitará un doble trasplante de pulmón por las secuelas del coronavirus
El actor sigue ingresado desde el 31 de marzo, estuvo en coma, se le amputó la pierna derecha y sufre las gravísimas secuelas de la enfermedad.
El actor canadiense, Nick Cordero, de 41 años, padece las consecuencias de la versión más agresiva del coronavirus. Ha estado en coma, sufrió la amputación de la pierna derecha y ahora deberá someterse a un doble trasplante de pulmón para hacer frente a las devastadoras secuelas que le ha dejado la COVID-19. En numerosas ocasiones los médicos que le han atendido llegaron a temer por su vida. Tres meses después de su ingreso, a finales de marzo, aquejado de una neumonía, el calvario de Nick Cordero continúa.
Ahora, que por fin ha dado negativo en el test de la enfermedad, su estado de salud sigue siendo muy delicado. Apenas puede moverse ya que ha perdido mucha fuerza y masa muscular, apenas puede hablar y necesita un doble trasplante de pulmón. "Existe una probabilidad del 99 por ciento de que necesitaría ese trasplante para vivir el tipo de vida que sé que mi esposo querría vivir", asegura Amanda Kloots, su esposa y con la que tiene un hijo de 1 año, Elvis. "Me dijeron cuatro veces que no sobreviviría", cuenta su mujer.
Entre las complicaciones derivadas de la enfermedad está la que afecta a la coagulación de la sangre. Muchos pacientes, como es el caso del actor, sufren de trombos. Nick ya los tuvo en la pierna, lo que le costó la amputación de la misma. Ahora los presenta en el pulmón, por lo que el trasplante parece ser la solución casi obligada.
La pandemia del COVID-19 no entiende de edades ni de géneros ni de nacionalidades. Pero sí es cierto que a todos no ataca por igual. Y, desde luego, es incierto que los más jóvenes no corren peligro extremos. Mientras unos se contagian, pero son solo asintomáticos, otros pasan la enfermedad sin enterarse y también hay quienes tienen peor suerte, tardan meses en curarse, acaban arrastrando múltiples secuelas o acaban muriendo.
Si bien es cierto, que la dureza de la pandemia se ha cebado, sobre todo, con las personas de más edad, esto no es una fórmula matemática. Y los más jóvenes no se libran de la virulencia de la peor versión de la COVID-19. El caso de Nick Cordero, uno de los muchos actores afincados en Hollywood, es uno de ellos. Su mujer, Amanda, recalca que antes de la enfermedad Nick era una persona sana y que carecía de patologías previas.
El calvario de Nick Cordero comenzó el 20 de marzo cuando empezó a tener los primeros síntomas. Con el paso de los días fue empeorando hasta el punto de que el día 31 fue ingresado por una neumonía en el Centro médico Cedars-Sinai de Los Ángeles, California. A partir de entonces las cosas no mejoraron sino más bien todo lo contrario hasta tal punto que tuvo que permanecer meses en la UVI en estado de inconsciencia.
Su mujer Amanda y su hijo Elvis son sus mayores apoyos. Recientemente, Amanda ha publicado una foto en Instagram en la que se le ve junto a su hijo luciendo una camiseta con un lema de agradecimiento hacia los sanitarios que cuidan de su marido. “Quiero agradecer enormemente a los Héroes de la Salud que se encargan de mi esposo. Noventa días de cuidado extraordinario y cuando él era positivo de COVID-19 arriesgaban sus vidas para salvar la suya”, concluye Kloots.