La lucha contra el coronavirus también afecta al reciclaje. Y es que una incorrecta en la gestión de elementos de protección como mascarillas, guantes y botes de gel puede ayudar a la propagación de la enfermedad. Estos productos, al igual que otros utilizados en hospitales, son considerados residuos infecciosos y requieren un tratamiento concreto.

Mascarillas

La nueva normativa que establece como obligatoria la utilización de estos objetos en los lugares públicos siempre que no se pueda mantener la distancia de seguridad está provocando un incremento en su uso. Las mascarillas higiénicas y las quirúrgicas no se consideran reutilizables, pero antes de proceder a tirarlas conviene saber cuál es el proceso correcto. En primer lugar, es necesario desecharlas en una bolsa que deberá quedar correctamente cerrada. Posteriormente deben ir siempre al contenedor del resto.

Guantes

El tratamiento de estos elementos, que no son recomendados por los médicos por los peligros que pueda acarrear un mal uso, es similar al de las mascarillas. Deben ser introducidos en una bolsa de plástico y, mientras sigan en el domicilio, conviene que se mantengan en un cubo distinto que el del resto de residuos. Luego nunca deben ser arrojados en el contenedor amarillo. El lugar para un correcto reciclaje de los guantes es el del resto.

Gel hidroalcohólico

Cuando no es posible efectuar un lavado con agua y jabón es recomendable contar con este producto para garantizar la higiene de manos. En el momento en el que estos envases llegan a su fin y hay que proceder a desecharlos no es necesario lavarlos antes. Los botes de gel hidroalcohólico son de plástico y, además, se consideran productos de limpieza, por lo que su destino final debe ser el contenedor amarillo.