Coronavirus en Uruguay: las claves de una 'victoria' sin cuarentena
El Gobierno uruguayo tomó varias medidas cuando salieron los primeros contagios y así logró frenar la expansión de la Covid-19 por todo el país.
Uruguay decretó la emergencia sanitaria el pasado 13 de marzo cuando se dieron cuatro casos positivos de la COVID-19. Se tomaron varias medidas para frenar la pandemia para volver de manera paulatina a la normalidad en el mes de mayo. En este momento, hay 746 personas contagiadas y 20 fallecidos. Unos datos que no han ido en aumento como si ocurre en el resto de países de Latinoamérica. El Gobierno uruguayo no cerró su actividad comercial y siguió actuando acorde a las nuevas medidas elegidas.
Las medidas de Uruguay
La primera medida tomada por el Gobierno fue la suspensión de las clases escolares de primaria, secundaria y universidad. Al igual que los eventos con mucho aforo y actividades no esenciales. También se decretó el cierre de fronteras internacionales y se realizó la "Operación todos en casa", esto permitió repatriar a los uruguayos que se encontraban fuera del país.
Otra medida fue la creación del Fondo Coronavirus con un crédito de 1.400 millones de dólares para los bancos y la reducción del 20% de los salarios de ministros y funcionarios públicos. El sector privado también ayudó al país con la donación de alimentos de varias marcas alimenticias y una donación de 100 millones de dólares.
El Gobierno no decretó el estado de emergencia pero aconsejó a la población a no salir de sus domicilios. "Si se toman los recaudos, si se aplica el distanciamiento social y se usa tapaboca, salir no está desaconsejado", informó Luis Lacalle Pou, presidente de Uruguay.
Desde mediados de mayo se reabrieron varios organismos públicos y supermercados. Los centros de enseñanza en zonas rurales también volvieron a abrir sus puertas. El resto de clases todavía siguen cerradas aunque se va a anunciar un plan para que los estudiantes recuperen cierta normalidad.