Cuánta gente murió por la gripe en la temporada 2018-19
En un inicio, el coronavirus fue comparado con la gripe, aunque el tiempo ha demostrado que la letalidad del COVID-19 es mayor, además de su virulencia.
El coronavirus fue comparado en un primer momento con la gripe común, considerándose una enfermedad vírica peligrosa para los segmentos de edad más altos y para sectores de población de riesgo. El tiempo ha demostrado que esos augurios eran poco acertados: el COVID-19 tiene una letalidad mucho mayor y también una tasa de infección mucho más elevada. Analizamos la comparativa entre ambas enfermedades, tomando como ejemplo la temporada de gripe 2018-19, que comprende entre la semana 20 del 2018 y la misma semana del 2019.
Los datos del Centro Nacional de Epidemiología muestran que en la temporada 2018-19, la gripe común afectó en España a un total de 534.100 personas, de las cuales 490.000 fueron atendidas en Atención Primaria, 35.300 fueron hospitalizadas, 2.500 pasaron por la UCI (Unidad de Cuidados Intensivos) y 6.300 acabaron muriendo a causa de la enfermedad. Así pues, la letalidad de la gripe en España en este periodo se estableció en el 1,2% de los casos atendidos por la Sanidad (lo cual no incluye los casos que Sanidad no detectó, por ser casos tan leves que no requirieron de consulta médica o de personas asintomáticas o que ya habían desarrollado inmunidad).
Nada que ver con el COVID-19, que este lunes 23 por la noche tenía registrados a nivel mundial 350.000 casos y 15.300 fallecimientos, lo que establece una mortalidad del 4,4%. De nuevo, es un dato poco real al no haberse detectado muchos casos por falta de testado, al tratarse de una enfermedad nueva que ha pillado a todo el sector sanitario mundial por sorpresa. Igualmente, la virulencia de la enfermedad es mayor a la de la gripe, que está tasada en una tasa de transmisión de 1,3 personas; la del COVId-19 todavía está por establecerse, pero el consenso médico ahora dice que se sitúa entre 2 y 3 personas por persona infectada. La mayor diferencia, con estos datos, está en la letalidad: la del coronavirus es cuatro veces mayor que la de la gripe común.