Debido al avance de la expansión del brote de Coronavirus (Covid-19), los presos que cumplen tercer grado y a aquellos a los que se les ha aplicado el artículo 100.2 (referente al principio de flexibilidad), podrán cumplir su condena en casa como medida para prevenir contagios.

La Junta de Tratamiento de cada prisión decidirá sobre como llevarse a cabo, después de recibir la instrucción desde Instituciones Penitenciarias. Algunas medidas para garantizar el control de los presos en sus domicilios sería la colocación de pulseras telemáticas o llamadas por teléfono a aquellos presos a los que se les ha facilitado pasar la cuarentena en casa, con el objetivo de saber su localización en todo momento.

Según informa 'El País', la circular recoge una serie de medidas única y exclusivamente a Centros de Inserción Social (CIS), y el objetivo pasa por controlar a los presos que se encuentran ahora en régimen de semilibertad sigan cumpliendo su condena mediante el control correspondiente y que establezcan los centros penitenciarios.

Entre los presos a los que se les ha aplicado el régimen de flexibilidad (100.2) se encuentran algunos de los políticos catalanes que se encuentran en las diferentes prisiones catalanas y que, pese a la orden dada desde las prisiones catalanas el pasado domingo de que estarían confinados en sus respectivos centros penitenciarios, ahora podrían cumplir la cuarentena en su domicilio siempre y cuando la Junta de Tratamiento de Cataluña lo permita.