“Una puta hora para salir. Tuve que ir al rompeolas. Si una de estas me pilla, literalmente me revienta. Tengo la espalda reventada, me acaba de dar un tirón en la pierna... es el peor día de surf, el más sufrido, ni me lo esperaba, es una pasada el Cantábrico. A ver si llego hasta allí y me voy de aquí. Estoy cansadísimo. Vamos hasta allí va. Llueve, día horrible, estoy muy cansado. Me he ganado la fabada”, dice en el primer minuto del vídeo Jarkota, el usuario de TikTok que ya acumula más de 150.000 reproducciones con su vídeo de surf en Gijón. O más bien, de él saliendo del agua en la playa de San Lorenzo de la ciudad asturiana.

Luego vienen unos cuantos gemidos mientras rema en dirección a la escalera de salida. También unos "fuerza, fuerza, fuerza y energía, quiero salir ya de aquí. Vámonos. Corre. La travesía que he tenido que hacer, de verdad. Dios. Qué horror". Al final, cuando llega, exhausto, se agarra a la barandilla y sube los escalones olvidándose completamente de la tabla, por lo que cuando llegan un par de olas la estampan contra la pared y no le queda otra que soltar un "lo siento tabla". Pasen y vean...

El vídeo no ha dejado indiferente a nadie. Tanto para bien como para mal. Es decir, hay gente que lo ve como un experto y valora su esfuerzo y conocimientos para salir del agua, mientras otros critican precisamente que no parece una situación tan difícil (por la falta de ola, por el tipo de tabla que lleva). O en otras palabras, hay quienes se creen perfectamente lo que él mismo comenta asegurando que "he sido socorrista 6 años y llevo surfeando unos cuantos, pero el Cantábrico nunca me deja de sorprender"; y hay quienes le dicen "¿y las olas? Llevas un corcho y no hay olas, tremenda actuación".

Rescate en Copacabana

Justamente después del vídeo de Gijón, otro surfista publicó un vídeo de cómo le rescataban en la famosa playa de Copacabana (Brasil). Atrapado por las corrientes y a pesar de estar grabándose, parece estar pasando más apuros.

Sea como sea, ambos vídeos estaría bien que el vídeo sirva para recordar que el surf es un deporte “de riesgo”. Pero que todo riesgo se puede reducir a la mínima expresión con experiencia, con una actuación correcta, no dejándose llevar por la confianza, etc. Entre otras cosas, es importante tener en cuenta la importancia de no surfear solo, de estudiar bien el mar (corrientes, marea, salidas, etc) antes de entrar y de ser consciente de los propios límites de cada uno para saber dónde y cuándo estar en cada lugar.