El bicampeón del mundo de surf de olas grandes, Billy Kemper, ha publicado un trilogía de vídeos sobre lo que ha sido su invierno 2022-2023, uno de los más intentos de su carrera. Por no decir el que más. Por un lado hablando de cómo empezó la temporada tras su grave lesión en Marruecos; y luego explicando la parte más dura del invierno, en la que visitó el hospital en más de una ocasión por culpa de duros wipeouts. Ahora, para cerrar la webserie, habla de la parte final: el Eddie Aikau Big Wave Invitational.

Para empezar su relato, Kemper explica que tras el accidente en Pipe, donde también vio a su mejor amigo luchar por su vida, lo lógico hubiera sido sentarse, descansar y dar por terminado el invierno. Pero entonces llegaron las olas de 20 metros y se activó el Eddie, en "uno de los mayores swells que he visto en mi vida". Eso lo cambió todo. Había visto su vida pasar por delante pero "una cosa es surfear Waimea y la otra el Waimea más grande de la historia. Tendría que estar muerto para no surfear el Eddie".

Ya en el día del campeonato, revela que a pesar de vivir a poco más de un kilómetro de allí, estuvo 45 minutos para poder llegar a la playa y que tenía el teléfono bloqueado. De la multitud que había. Y esto es lo que decía antes de entrar al agua: "Estar entre el selecto grupo de gente que iba a entrar era un honor. Había gente como Michael Ho, un segundo padre para mí, de 65 años. Había surfeado en la bahía con el propio Eddie y en los 10 eventos anteriores. Es todo lo que había soñado. En cuanto a las olas, nunca había visto una barra que ocupara toda la bahía, que empezaba rompiendo por cada lado y se juntaba en el medio".

Respecto a la competición destaca varios momentos. Uno en el que sufrió un terrible wipeout en la que le pareció "la ola más grande del día". El ganador, Luke Shepardson, cogió la siguiente y se llevó un 10. A él le tocó salir del agua. Entonces "vi a mis niños y a mi mujer gritando y ahí empezó el evento para mí. Al poco estaba surfeando un muro de agua, un sueño de infancia, celebrándolo con la gente". Y el final... no os hacemos spoiler. Pero se fue con una sonrisa.