Kimmy Fasani es una de las pioneras del snowboard femenino, en 2011 fue la primera mujer en planchar un doble backflip en el snowpark y en backcountry. Ese mismo año firmó su contrato con Burton Snowboards y se convirtió en la cara de la línea AK de la marca.

Fasani ha sido una de las pocas mujeres en aparecer en vídeos de snowboard de Standard Films o tener partes en videos de Absinthe Films. Galardonada como rider del año en 2016 Kimmy siempre ha luchado para llevar el snowboard femenino al siguiente nivel en la montaña y fuera de ella.

En 2017, cuando anunció su primer embarazo lo hizo con la determinación que sólo una verdadera líder puede hacerlo, afirmando que a pesar de que iba a ser mamá pretendía seguir su carrera como snowboarder profesional y para ello consiguió que Burton Snowboards, como su principal patrocinador, le siguiera apoyando durante esta fase de su vida y que la empresa incluyera este tipo de cláusulas en los contratos de las otras deportistas. Marcando así un precedente en la industria y el snowboarding profesional.

Kimmy ha narrado desde entonces su experiencia como madre y snowboarder de una manera muy abierta y honesta en las redes sociales hasta que en diciembre del año pasado Kimmy compartió las noticias de su diagnóstico de cáncer de mama y ha seguido compartiendo la historia de su lucha contra el cáncer hasta que este mes anunció que lo había superado oficialmente.

El mes de octubre es el mes de la concienciación del cáncer de mama y lo ha aprovechado para realizar una campaña a través de su propia historia de lucha y superación y con este vídeo cuenta su trayectoria y los aprendizajes.

Después de verlo hemos tenido también la oportunidad de hablar con Kimmy.

La primera pregunta que quiero hacer y de la que creo que todos queremos saber la respuesta es ¿cómo estás?

Ha sido un torbellino de emociones con tantos altibajos que siento que estoy saliendo de la niebla. También que soy capaz de poner los pies en el suelo y ver dónde estoy. Creo que lo estoy haciendo bastante bien. Definitivamente sigo pasando por altibajos y distintas emociones y trato de procesar lo que sucedió tan rápido. Pero estoy muy emocionada de que se acerque el invierno porque pasar tiempo al aire libre y ver nevar siempre es una excelente manera de encontrar mi paz.

En el documental explicas que cuando recibiste tu diagnóstico aprendiste que tener un estilo de vida sana y activo no te protegieron contra el cáncer, pero te convirtieron en una mejor paciente. ¿Cómo?

Es una gran pregunta. Y fue algo con lo que realmente luché. Tras mi diagnóstico, estaba muy confundida y creo que casi avergonzada. Porque he sido embajadora de la concienciación sobre el cáncer de mama durante tantos años, he sido una defensora de mi cuerpo y mi conciencia y simplemente vivo un estilo de vida saludable y activo. Especialmente tras ver a mis padres pasar por un cáncer. Traté de evitar el estilo de vida que -quizás- contribuyó a la complejidad de su enfermedad.

Fue mi cirujana, mi médico, la que en una conversación bastante franca me dijo que parecía tener un estilo de vida saludable y activo y eso era número uno, lo más importante que pude hacer, ya que no solo iba a estar saludable física y mentalmente, sino que iba a ser más fuerte. Así que si tienes que someterse a un tratamiento, serás mucho más fuerte, tu cuerpo tendrá más resistencia y más resiliencia.

Estas palabras me permitieron no ser tan dura conmigo misma: traté de quitarme parte de la culpa sabiendo que en realidad no importa quiénes somos o qué hacemos, el cáncer o las dificultades pueden ocurrir, pero es muy, muy importante cuidarnos porque vamos a tener más capacidad de recuperación para superar estos tiempos difíciles cuando estamos mental y físicamente en sintonía con nuestro cuerpo.

Me recuerda a cuando estás en la montaña y hay un accidente o una avalancha. Tu primera reacción es pensar que no puede ser, que por qué te está pasando a ti, ¿cómo llevas esas lecciones aprendidas de esa especie de negación de lo que está pasando desde el deporte en la montaña, hacia tu vida personal, y en este caso, en el momento de tu diagnóstico?

Me encanta tu comparación porque gran parte de esta experiencia para mí ha sido cómo mi relación con la montaña y mis experiencias en la montañas: utilizando las herramientas que he desarrollado para superar dificultades o aprovechar mis fortalezas.

Realmente sentí que la única forma de salir de esto era compartir el conocimiento porque me sentía un poco perdida en mi propia piel contra el cáncer de mama o el cáncer en general. 

Sinceramente siempre había pensado que yo no sería alguien que tuviera cáncer. Afrontarlo me mostró que tal vez había oportunidades para que otras personas se dieran cuenta de eso, solo tenemos que tener esa conciencia.

Cuando pasan estas cosas tienes que ser capaz de profundizar en esa intuición de la misma manera que lo haces en las montañas, y decir, está bien, puede que no sea lo más conveniente, definitivamente no es lo que esperaba. Pero tuve que agachar la cabeza, desarrollar un equipo de médicos y simplemente luchar para vivir. Y de la misma manera, cuando estás en las montañas, si ocurre una avalancha o algo así, no es lo que esperas, pero tienes que encontrar la salida, tienes que tener todo ese conocimiento y esa preparación de tu cursos de avalanchas o lo que sea, para simplemente ponerlo en funcionamiento y si alguien está enterrado, lo vas a salvar.

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Pedir ayuda puede ser muy difícil, sobre todo siendo una líder fuerte, una mujer independiente y que has tenido siempre tanto control sobre tu cuerpo. ¿Cómo fue esa experiencia?

Esa también ha sido otra gran lección de aprendizaje. Soy una persona muy independiente, que toma riesgos muy calculados y supongo que me encanta poder confiar en mí misma. Evolucioné mucho siendo de esa manera, siento que gran parte de lo que hacemos en las montañas depende del equipo de personas que tienes a tu alrededor. Quieres personas que te animen, te apoyen y te alienten y que también puedan estar contigo.

Esto es lo que realmente encontré a través de este proceso: ese equipo de personas que sabía que iban a darme todo el apoyo, todo el aliento, y también la capacidad de simplemente escuchar y ayudarme a procesar y eliminar todo el ruido y las distracciones. Sabiendo que iba a ser un desafío, pero también que era temporal.

Se podría decir que vi este proceso como la vida y las estaciones, ¿sabes? Pasas por estas estaciones de la vida y estaciones de la naturaleza donde las cosas mueren, y luego florecen y vuelves a la vida plena y solo traté de tener esas imágenes de mí misma y tratar de concentrarme en las cosas buenas la mayor parte del tiempo. Tuve que enfrentar muchos desafíos mentales y pensar que está bien sentirse así durante estos días. Me centré solo en sentirme cómoda conmigo misma y saber que tenía un grupo de personas a mi alrededor que realmente estaban allí para apoyarme durante el proceso.

Mencionas el tema de compartir tu experiencia, tu historia. En el vídeo dices algo así como "compartir mi historia fue mi técnica de supervivencia". Cuando obtuviste el diagnóstico y decidiste compartirlo en las redes sociales, ¿lo hiciste para ti o para ayudar o inspirar a todos los demás?

Esperé tres semanas antes de contárselo al mundo, tuve que pasar por un proceso de tratar de averiguar cómo iba a pasar por el tratamiento, realmente quería tener muchas respuestas, o al menos un plan. Creo que cualquiera que haya pasado por cáncer de mama, o este tipo de diagnósticos aterradores lo entenderá. Es como si quisieras tener una base de información antes de publicarla. Pero sentí que había mucho que ya había aprendidó y que había una manera en que podía compartirlo, que también sería curativo para mí, porque sentí que me iba a comunicar a una audiencia de personas que pudo haber pasado por esto antes que yo.

En cierto modo quiero ayudar a acelerar la curva de aprendizaje para cualquiera que esté entrando en esta fase. También había personas al otro lado que estaban ayudando a acelerar mi curva de aprendizaje. Realmente me siento de la misma manera que he retribuido en el snowboard a través de diferentes eventos y tratando de ayudar a las mujeres a progresar, sentí que esta era solo otra vía para ser transparente y demostrar que no somos invencibles.

Soy un atleta profesional, pero aún así no hace que sea más fácil para mí pasar por esto. Quería que fuera lo más honesto y sincero posible. A medida que estaba en el viaje y tenía cosas que decir también fue una sanación egoísta para mí. Fue realmente una experiencia catártica escribir sobre estos momentos que fueron extremadamente impactantes. Luego, solo para ver el compromiso de las personas y sus vivencias, siento que crea una interacción social más saludable en las redes. Unas redes que suelen mostrar siempre un mundo perfecto y yo realmente quería poder conectarme con la gente en un nivel más profundo.

Hay algo más que también quería decir sobre compartir mi historia a través de las redes sociales: una forma de tener esa red de personas alrededor que me han ayudado a compartir el peso de lo que estaba pasando es clave. Así que ponerlo allí permitió que no solo estuviera sobre mis hombros, sino que creó un efecto de telaraña donde otras personas pudieron ayudarnos a sostenernos y aportar el poder para superarlo.

Viendo cómo has compartido tu experiencia y tu historia de superación y sabiendo la importancia que han tenido siempre la montaña y la naturaleza en tu vida y en tu carrera, no nos sorprendió saber que estabas creando un fundación para ayudar a las personas a construir esta caja de herramientas que te ha proporcionado tu vida en la montaña.

Sí, la estructura de la Fundación Benchetler Fasani Foundation es realmente un concepto del que mi esposo y yo habíamos hablado mientras construíamos nuestro testamento, ya sabes, como nuestra herencia al tener hijos, y siempre nos ha inspirado mucho los poderes curativos al aire libre y de la naturaleza. Al perder a ambos padres, en mi caso, siempre corrí a las montañas como mi forma de curación. Y siento que te ponen en la perspectiva de darte cuenta de que hay mucho más en el mundo que nuestro sufrimiento.

Hay una manera de conectarse con la naturaleza que realmente nos ayuda a animarnos y nos da endorfinas y nos hace sentir mucho más conectados y arraigados. En el caso de mi marido, él también perdió a su padre.

Así que cuando me diagnosticaron, mi marido sintió que era el momento de llevar la Fundación adelante. Creo que había partes de mí que no estaban preparadas, porque estaba pasando por mis propios desafíos mentalmente. Pero él vio la oportunidad de usar los tantos recursos y la comunidad que teníamos para apoyarnos. Sabiendo que ayudaríamos otras personas que quizás no tengan acceso a ellos. 

Por ejemplo, cuando estaba sentada en el consultorio del médico, las enfermeras eran increíbles. Me preguntaban sobre mi sistema de apoyo, es parte de su rutina de pruebas de diagnóstico averiguar si dispones de ese sistema porque si no, esas enfermeras lo serán. Como paciente necesitas el apoyo para sentir que tienes la fuerza.

Así que esto es lo que queremos crear a través de esta fundación: queremos que la gente sepa, como nosotros, que estamos aquí para ellos y que sus dificultades son importantes. También queremos mostrar cómo sanar, salir al aire libre y conectar contigo mismo. Y conectarse con ese sentido más profundo de la vida.

Estoy muy emocionada porque ha tenido muy buena acogida, la gente está muy emocionada, así que me encantaría poder traer a tantas personas como pueda que hayan pasado por cosas difíciles a las montañas o en su espacio de la naturaleza que más les inspire, para que podamos ayudarlos a desarrollar su fuerza. Luego, con suerte, ese efecto dominó ayudará a sus familias y se extenderá a una red más amplia de personas.

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Cuando dices que por fin volviste a entrever la sensación de normalidad al poder viajar con tu familia a la montaña lo acompañas de una escena viajando con vuestros hijos en helicóptero al lujoso y exclusivo Baldface Lodge en Canadá. ¿No crees que eso no transmite precisamente normalidad para la mayoría de las personas?

Sabes, es increíble que menciones eso. Creo que es importante que la gente sepa que vivimos una vida muy privilegiada. Hemos tenido la suerte de tener la salida para acceder a las montañas de la manera que la tenemos. Para llegar a Baldface vuelas en un helicóptero y eso es parte del paquete de lo especial de ir a ese lugar. Está cerca de este pequeño pueblo de Nelson en la Columbia Británica. Obviamente, teniendo a toda nuestra familia allí fue un gran regalo. Pero también comparto que cuando vi esa parte de la película no me pareció necesariamente identificable con todos. Pero es que fue increíble contar con el apoyo del propietario de Baldface y la propietaria de Burton, Dona, que ofrecen sus recursos, directamente para nosotros, para alentar nuestra curación. Eso es lo que es tan inspirador para mí, que muchas personas increíbles que tienen más oportunidades que yo se presentaron y dijeron: Oye, queremos crear una experiencia para ti.

Es de esta manera que queremos convertir los recursos que tenemos nosotros y decir: "Oye, queremos ayudar a otras personas a tener este tipo de experiencias en cualquier forma que sea posible". No significa que todo el mundo vaya a poder volar en helicóptero o acceder a las montañas de esa manera. Pero quiero poder brindar cualquier tipo de experiencia que podamos para ayudar a otras personas a sentirse tan especiales. Sentir ese momento único en el que dicen, "oh, Dios mío, nunca había hecho algo como esto o nunca supe que esto era incluso una opción". Y eso es inspirador, y eso te ayuda a sanar. Te hace sentir más resistente, más capaz y más confiado. Ese viaje a Baldface transformó por completo mi salud mental.

Como atleta, tu cuerpo siempre ha sido el motor de tu vida, ¿cómo has vivido la transformación física con la doble masectomía?

La cirugía era una montaña rusa emocional. Me encantó mi equipo de médicos y me animaron mucho a no hacerme la reconstrucción debido al tipo de cáncer que tengo. Así que llegué a un punto en el que simplemente no quería que mi cuerpo, o el cómo me veía, fuera lo que me iba a definir. Quería poder dejar a un lado esos pensamientos. Aunque obviamente es un proceso de duelo. Ya sabes, estás cambiando tu cuerpo.

Afeitarme la cabeza, perder mis senos y pasar por esta transformación, porque definitivamente ha sido una transformación, es un desafío, y al mismo tiempo he tratado de enfrentarlo con coraje sabiendo que el exterior, la cáscara, no importa.

Cómo figura pública es fácil caer en que este tipo de experiencias de tu vida sean por las que la gente te recuerda. Pero imagino que no quieres ser solo esa snowboarder que tuvo cáncer, ¿verdad?

Creo que mucho de lo que hacemos a lo largo de nuestra vida puede definirnos por momentos de impacto. Solo espero que la gente pueda ver lo que he hecho en mi tabla de snowboard, y luego mi trabajo para la igualdad de las mujeres en el snowboard, y por la maternidad. Ahora, también, para la salud, la salud mental y el cáncer, o lo que sea, espero que sean solo momentos de impacto en los que las personas puedan recordarme y también ver que mi conexión con mi tabla de snowboard es lo que finalmente impulsa mi deseo de vivir.

Espero que se hable de este momento porque creo que es muy importante además de las otras cosas de las que he hablado, creo que también es importante que las mamás sientan que tienen un lugar en este deporte. Siento que es importante que las personas se den cuenta de que un diagnóstico de cáncer es aterrador y que es para siempre. Aunque ahora no tenga cáncer es algo que será muy controlado durante el resto de mi vida. Cambiará para siempre quién soy de la misma manera que los otros momentos también lo han hecho.

Sin embargo, espero poder volver a subirme a mi tabla de snowboard y que parte de mi recuerdo se disuelva en una conversación sobre simplemente estar presente y vivir la vida al máximo y tratar de hacer que cada momento cuente y sea agradable, y eso suena a cliché a veces, pero este es es diferente. Todos tenemos estos obstáculos realmente grandes por los que pasar en la vida y entendemos que son solo obstáculos y que pueden estar en nuestro pasado y podemos seguir adelante y podemos encontrar una mayor fuerza y resistencia a través de ellos.