NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

SURF

El primer gran susto para el surf de olas artificiales acaba bien

Brett Pritchard se recupera milagrosamente del ataque al corazón sufrido en la piscina URBNSURF de Melbourne y asegura que volverá a surfear.

Actualizado a
Brett Pritchard muestra la cicatriz que le quedó tras la operación en el corazón recibida tras desmayarse en el URBNSURF park de Melbourne (Australia).
YouTube

Justo antes de que empezara el verano (el invierno austral), los medios australianos informaron de un grave accidente en el surf park de URBNSURF, en Melbourne (Australia). Al no trascender mucha información del suceso, se especuló con varias hipótesis, si bien finalmente se confirmó como versión oficial que se trataba de un ataque al corazón por parte de la víctima que nada tenía que ver con las instalaciones.

Lo último que se sabía es que en plena sesión de surf, la víctima había perdido el conocimiento, la habían sacado del agua, le habían practicado la reanimación cardiopulmonar y que había llegado con vida al hospital. Pero a partir de allí, silencio mediático.

Dos meses después, los medios australianos han podido hablar con la víctima, que se ha recuperado milagrosamente del accidente, para que contara su versión de la historia. Brett Pritchard, de 47 años, confirma que sufrió un ataque al corazón (ya tenía problemas) por culpa del cual perdió la conciencia y cayó de la tabla. El staff del centro le practicó el CPR antes de que los médicos llegaran y pudieran trasladarle al hospital en estado crítico. "Lo que hicieron, básicamente me salvó la vida", relata a 7News Australia. "Fue surrealista, pero también ves que todo lo que has practicado vale la pena", dicen desde URBNSURF sobre ese momento en el que hay que actuar rápido y bien.

Como novedad, se sabe también que una vez en el centro médico se le indujo el coma y que se le sometió a una cirugía. Incluso que durante una hora se le dio por muerto, pero que finalmente pudieron salvarle y hoy ya está 100% recuperado. Y que a pesar de esta experiencia cercana a la muerte surfeando, volverá al agua: “Aunque seguramente no me meta en olas grandes la primera vez, seguramente no pasen de mi rodilla, seguiré surfeando el resto de mi vida”.