Un atleta extremo graba el terrible e impactante colapso de un glaciar
Harry Shimmin y un grupo de excursionistas presencian y graban un descenso descontrolado de hielo y nieve en las montañas de Tian Shan, Kirguistán.
![Hielo y nieve chocando contra una piedra y saltando por los aires en una avalancha producida por el colapso de un glaciar en las montañas de Tian Shan, Kirguistán.](https://img.asmedia.epimg.net/resizer/v2/LXD4DYPVQNJQBMH35SEAW4GGAU.jpg?auth=dab2b69aa84e2cdd166d5fbd4a91cb2dac7841476bc3635ebdecbb2e0bec0bb6&width=360&height=203&smart=true)
Harry Shimmin es un apasionado del freeski, el buceo, el cliff diving, la caída libre y la aventura en general. Así, a través de su cuenta de Instagram, publica todo lo que hace en estas disciplinas y viajes por todo el mundo. Entre otras cosas, por ejemplo, tiene el récord Guinness de backflips (volteretas hacia atrás) en skydiving. Pero no se ha hecho viral hasta que ha vivido una experiencia cuanto menos aterradora en las montañas de Tian Shan, en Kirguistán. Este es el vídeo y, después, su contextualización:
"9 británicos y 1 americano estuvimos practicando montañismo por las montañas de Tian Shan, en Kirguistán. Habíamos llegado al punto más alto de la excusión cuando me separé del grupo para tomar fotos en lo alto de una colina, en un acantilado. Mientras tomaba las fotos escuché un fuerte sonido de hielo rompiéndose detrás de mí. Aquí empieza el vídeo.
Como llevaba allí unos minutos, sabía de un buen lugar para refugiarme. Estaba al borde de un acantilado, por lo que lo único que podía hacer era correr hacia la avalancha y alejarme del refugio de mi lado (por eso no me muevo). Sí, sé que me espero al último segundo para ponerme a cubierto y que hubiera sido más seguro hacerlo antes. Soy consciente de que corrí un gran riesgo. De hecho, cuando la nieve empezó a pasar por encima todo se oscureció, me costaba respirar y pensé que podía morir.
Pero una vez terminó, la adrenalina me recorrió todo el cuerpo. Sabía que el resto del grupo estaba lejos de la avalancha y que estarían bien. Cuando me uní a ellos de nuevo lo certifiqué, aunue uno se había hecho daño en la rodilla y otro tenía algunas magulladuras. El grupo, en general, reía y lloraba, felices por estar vivos. Un poco más tarde nos dimos cuenta de lo afortunados que fuimos. Si llegamos a caminar 5 minutos más, estaríamos todos muertos. El camino que íbamos a tomar estaba totalmente cubierto por el hielo. Ni corriendo nos hubiéramos salvado de las rocas y los trozos de hielo. Tengo imágenes de todo, tanto antes como después, los iré publicando en mi cuenta cuando tenga buena señal".
Tal y como indican los expertos, no se trata de una avalancha en sí, sino del colapso de un glaciar. Un efecto del calentamiento global que hace unos días mató a varias personas cuando al glaciar de la Marmolada (Alpes italianos) le ocurrió lo mismo. En este caso, pero, en "el tercer polo", que es tal y como llaman a la meseta tibetana que se asienta entre los países de Tayikistán y Kirguistán y que alberga la mayor reserva mundial de agua congelada fuera de las regiones polares. No hace falta decir que el aumento de la población (que se abastece de las mismas) y las altas temperaturas de los últimos años están reduciendo dichas existencias notablemente.