Salvado in extremis al escribir 'un mensaje de socorro en la arena antes de desmayarse
Los servicios de emergencia de Nueva Zelanda rescataron a un surfista que cayó inconsciente al lado de un mensaje en la arena que decía 'Help'.
Cuántas veces se ha visto en las películas que algún náufrago escribía mensajes en la arena de la playa para ver si algún avión o helicóptero le localizaba y le podía salvar. Cuántas veces, también, se ha visto como estos mensajes no les servían de ayuda. Pues bien, en Nueva Zelanda ha ocurrido un caso real con -spoiler- un buen final. Eso sí, relacionado con el surf y no con un barco.
Los hechos han ocurrido en una playa remota de este país, en las antípodas. En concreto, al oeste de Auckland, donde un surfista se encontraba surfeando tranquilamente cuando una ola le ganó la partida y le envió contra unas rocas. Herido, consiguió regresar a la playa, pero vio que era incapaz de andar, así que gastó su último cartucho y escribió la palabra 'HELP' (ayuda) en la arena con un tamaño considerable.
Acto seguido, el protagonista de esta historia perdió el conocimiento. Justo al lado de las letras que acababa de escribir. La dura imagen fue publicada por los medios locales de Nueva Zelanda, con este aspecto:
Según explican las autoridades a la prensa local, el sitio donde la víctima escribió la palabra no era visible desde los senderos al norte de la bahía Mercer. Además, al estar la zona en nivel de alerta 3 debido a la situación actual de pandemia por coronavirus, no es habitual que pase mucha gente ni por el norte ni por el sur. Pero por suerte, según el supervisor del servicio de rescate, un chico y una chica pasaron por allí en ese momento y lo vieron.
Avisadas las autoridades, el equipo de rescate se desplazó a la playa, el surfista pudo recibir los primeros auxilios en la arena y posteriormente fue trasladado al hospital, done se recupera favorablemente del incidente. Sin duda, una historia de película, aunque con la variante de que el protagonsita no era el típico náufrago, sino un surfista con la capacidad de razonar bien lo que debía hacer si quería agotar las opciones de sobrevivir a la mala suerte que había tenido.