Hay historias relacionadas con el surf que tienen la capacidad de dejar perpleja a cualquier persona que las lea. La que llega desde Nelson (Nueva Zelanda) es una de ellas. Tiene que ver con un engaño en una relación de pareja, un barco quemado y el robo de una tabla de surf.

Según explican fuentes policiales, los incidentes empezaron cuando Daniel Noel Wafer, un chico de 37 años, descubrió que su pareja le estaba engañando. Mantuvieron una fuerte discusión y el amante recogió a la pareja, tras lo cual su enfado subió de nivel. Aparentemente muy bebido y ya de madrugada, Wafer y un acompañante se plantaron en el puerto. Así relata la policía lo que ocurrió a partir de ese momento:

A la 01:38, Wafer y un compañero aparecieron en el muelle donde la expareja tiene un barco, el The Wairangi. Subieron a bordo y se llevaron una tabla de surf, pensando que era de un amigo. Luego prendieron fuego al barco, recogieron la tabla y volvieron a subir al vehículo a las 01:41.

La pareja se dirigió a otr parking, desde donde grabaron la escena. Los bomberos aparecieron media hora más tarde y pudieron evitar que el barco -de 7 metros- se hundiera, pero estaba ya prácticamente destrozado.

Cuando fue interrogado por la policía, Wafer declaró que nunca estuvo en ese muelle, pero la declaración de su compañero le hizo cambiar la declaración: admitió que había robado la tabla de surf pero no que hubiera iniciado el incendio. Tras enseñarle las grabaciones de videovigilancia reconoció que volvió a la zona para ver el fuego, pero siguió sin admitir que lo había provocado él. Actualmente, Wafer está acusado de incendio intencionado y robo y de momento debe pagar una multa de 17.500 dólares, para la cual -según los medios locales- se ha vendido todo lo que tenía.