Red Bull Roller Coaster: oro de Jake Ilardi y Alana Smith en un fin de semana épico
Una jornada en unas instalaciones de lo más originales para enfrentar a once de los mejores skaters del panorama. Risas, diversión y destreza en un evento sin igual.
Este fin de semana ha tenido lugar una nueva edición de la Red Bull Roller Coaster, en Múnich, Alemania, donde once de los mejores skaters del mundo se han disputado el podio de esta peculiar competición en un skatepark con una mezcla de street y park –entre un montón de gaps y hasta un loop- dejando un escenario de lo más singular. Un espacio para romperse la cabeza –literalmente- y encontrar la ronda más divertida y complicada. ¡Todo un show!
Empezando por las clasificatorias del viernes, las cuales quedaron envueltas por una intensidad y unas rondas de lo más ajustadas entre skaters como Alex Midler, Jaime Mateu, Alex Hallford –el único en conseguir cancelar el loop- o Jake Illardi, la jornada dejó imágenes para enmarcar. Con este reparto estelar, las clasificatorias no podrían haber estado más reñidas pero fue la ronda de Hallford la que se llevó el primer puesto en las eliminatorias de la Red Bull Roller Coaster. En categoría femenina fue Alana Smith que, con la versatilidad que tanto le caracteriza, consiguió escalar hasta la primera posición.
En la final, a pesar de las grandes rondas de Mateu, Hallford y Alex Midler fue un brillante Jake Ilardi quién consiguió conquistar la máxima puntuación de los jueces. A pesar del igualado nivel de la prueba, el español Jaime Mateu se quedó con una tercera posición en una jornada donde, según él, era más importante pasarlo bien que ganar. El otro español, Danny León, fue quinto. Por lo que respecta a la final femenina, acabó siendo un eficaz Alana Smith la que terminó por derrotar a la estadounidense Jordyn Barratt y a la alemana Catherine Marquis en una enfrentamiento que culminó con una impecable ronda final de Smith.
Una jornada con las condiciones ideales para vivir la pura tensión del skateboard durante una final que contó con un nivel de atletas de lo más igualado. Puro espectáculo donde la adrenalina, los trucazos, la destreza, pero sobretodo, la diversión y la originalidad desbordaron al público del Munich’s Olympic Park en un show de lo más épico.