Dainese sobrevive al esprint
El italiano del equipo DSM bate a su compañero Ganna en Íscar tras salvar una caída a menos de un kilómetro que eliminó al favorito, Groves.
Alberto Dainese se adjudicó este viernes al esprint la 19ª etapa de la Vuelta a España, una jornada íntegramente castellana, entre La Bañeza (León) e Íscar (Valladolid), que marcaba la transición entre los dos vibrantes viajes por la montaña de Asturias y los dos trayectos finales por la Comunidad de Madrid, esa prometedora traca por la Sierra de Guadarrama, este sábado, y el colofón festivo en la capital, el domingo.
El italiano de 25 años, campeón de Europa sub-23 en 2019 y ganador de dos etapas en el Giro, estrenó su palmarés en la ronda española tras batir a su compatriota Filippo Ganna, un brillante contrarrelojista, metido de nuevo en labores de velocista. Ganna dijo, tras dominar la crono de Valladolid, que no le gustan las llegadas masivas, pero la verdad es que no se le dan nada mal, como demuestran sus dos segundos puestos en esta edición.
Kaden Groves, vencedor de dos etapas en la primera semana de competición, en Tarragona y Burriana, y en consecuencia máximo favorito en la última recta, no pudo pujar por la victoria al sufrir una caída a poco más de un kilómetro de la meta. El australiano se fue al suelo en plena preparación del esprint, junto a otros compañeros del Alpecin y a sus rivales del DSM, el equipo de Dainese. Fue curiosa la imagen de dos lanzadores del vencedor italiano, Sean Flynn y Christopher Hamilton, celebrando el triunfo ensangrentados tras levantarse de la calzada y conocer la noticia del éxito de su colega. Dainese sobrevivió al accidente, igual que ha sobrevivido a la dureza de esta Vuelta. Los velocistas, a estas alturas, son supervivientes.
El propio Alpecin cargó con la responsabilidad de la captura durante el llano trayecto de 177 kilómetros, en el que mantuvo siempre bajo lupa a los aventureros del día, cuatro soñadores: Clément Davy (Groupama), Paul Lapeira (Ag2r), Mathis Le Berre (Arkéa) y Michal Schlegel (Caja Rural). Era la penúltima oportunidad para los velocistas, por lo que el equipo belga rodó con el cronómetro en la mano para brindarse la opción de sumar la tercera victoria con Groves. Tendrá que esperar a Madrid. La bala final.
Antes de la prestigiosa volata del paseo del Prado, el pelotón tendrá que afrontar este sábado una tremenda etapa de 208 kilómetros, un serrucho con diez cotas de tercera categoría, una especie de Lieja-Bastoña-Lieja por la Sierra de Guadarrama, un perfil de clásica insertado en una gran ronda. Que nadie se imagine el tradicional trazado de los Puertos. Es otra cosa. Había mucha expectación ante este recorrido, que podría haber sido decisivo para el maillot rojo o para el podio, pero la autoridad del Jumbo ha desinflado un poco su amenaza. Aun así, un ataque lejano puede crear muchos problemas en un trazado sin descanso. Si es que alguien osa retar al tridente invencible.