Un Tour vivo
Pogacar es líder con 39″ sobre Vingegaard. En 2021, aventajaba en 5:32 al danés a estas alturas. El calor apretará. “Estos días descubriremos quién es el más fuerte”. dijo Tadej.
Son nueve ya las etapas disputadas en el Tour de Francia, acercándonos al ecuador de la carrera, que concluirá el próximo día 24 de julio en París, y Pogacar está vestido de amarillo. Ninguna sorpresa, porque acudía a la carrera como gran favorito para conquistar su tercer Tour consecutivo, pero el esloveno tiene mejores sensaciones que ventaja en la clasificación general. Él y Wout van Aert son los dos grandes protagonistas de lo que llevamos en esta edición, repartiéndose dos etapas cada uno y siendo los principales animadores de la carrera.
En el caso de Pogacar, se impuso en dos finales completamente distintos como Longwy, tras un esprint reducido, y la Super Planche des Belles Filles, con rampas del 24%. Con todo ello, la diferencia respecto a Jonas Vingegaard, segundo en la edición de 2021 y su teórico gran rival de nuevo en 2022, es de 39 segundos, y eso que Pogacar sumó 24″ en total en bonificaciones por los 6″ del danés.
Con estos tiempos volverán a reanudar este martes la carrera en la décima etapa tras la jornada de descanso, mientras que hace un año el esloveno volvía del primer día de parón con 5:32 de renta respecto a un Vingegaard que marchaba cuarto por aquel entonces. El segundo a estas alturas en la pasada edición, Ben O’Connor (que no tomará la salida de la décima etapa por lesión), estaba a 2:01 de un Tadej que dominaba aquel Tour con mano de hierro. En esta ocasión todo está más abierto, y esta semana se pondrán las cartas sobre la mesa en los Alpes, especialmente el miércoles, en el Col du Granon, y el jueves, en Alpe d’Huez.
“Estos días descubriremos quién es el más fuerte, pero confío en mi forma”, anunciaba Pogacar. Salió a rodar junto a su pareja, Urska Zigart, la también corredora que portaba su maillot del equipo BikeExchange. Tadej hacía lo propio con el del UAE... una indumentaria que solo se le vio en este Tour el primer día, en la contrarreloj en Copenhague. El resto de las jornadas vistió el blanco de mejor joven (cuatro días) y el amarillo de líder (los últimos cuatro).
Y, además, por la mañana se libró por el momento de un buen susto: todos los corredores dieron negativo en los test de coronavirus que realizó el Tour. Tras el positivo días atrás de su compañero Laengen, en el UAE había cierto nerviosismo, pero tanto en el equipo de los Emiratos como en todo el pelotón, celebraron esta pequeña victoria. Eso sí, la UCI avisó: “No hay que bajar la guardia”. Pogacar, que todos los días se muestra relajado y sin aparente nerviosismo, destaca que en el UAE van por buen camino. “Trabajamos un año entero, junto al equipo, para estar aquí, pero uno nunca sabe cuándo se irá a casa por la COVID”, añadía. En cuanto al clima, se espera una semana muy calurosa en Francia, unas condiciones que no son las preferidas del esloveno. “A nadie le gusta correr durante cinco horas a 40 grados. Eso no es saludable, pero es igual para todos”, cuenta. El Tour está completamente abierto.