Ediciones
Resultados
Síguenos en
Hola
Ciclismo | Itzulia

Ewan, el australiano volador

El corredor de Ineos cumple los pronósticos en la llegada al esprint de Lodosa y el alemán Schachmann sigue líder.

Ewan, el australiano volador
Alfonso Herrán
Coordinador en la delegación de País Vasco de Diario AS desde 2017. En 2008 entró en Diario AS como redactor de polideportivo y desde entonces es su casa. Le gusta tocar todos los palos, pero ahora está más centrado en realizar las crónicas del Athletic y el Bilbao Basket. Licenciado en Filología Hispánica por la Universidad de Deusto.
Actualizado a

Si la crono inaugural de la Itzulia dejó perplejos a casi todos, la segunda etapa se ajustó como un guante a la lógica. Pasó todo lo previsto, es decir, que se la anotara Ewan con una autoridad pasmosa, sin dar pie a la sorpresa. Hizo diana en el único final acorde a sus características. No suele ser fácil cumplir los pronósticos para alguien tan favorito, pero este hombre se anota esprints con la gorra. El único llegador puro del pelotón dominó la meta como si lo tuviera todo calculado desde que se diseñó el perfil del día.

El australiano tiene cinco entorchados de este tipo en el Tour y otros tantos en el Giro en su palmarés, así como uno en la Vuelta. Sabe, por lo tanto, lo que hay que hacer en cada centímetro del asfalto en ocasiones así. Barbilla pegada a la rueda delantera, poniendo ahí todo el centro de gravedad, y pedaleo como si fuera una batidora. Fue serpenteando de derecha a izquierda para burlar el control del Intermarché, con Van Boven lanzado por un compañero y derrotado sin paliativos. Dio un manotazo al manillar al entrar en meta abrumado por el martillo de Ewan, el aussie volador y demoledor, un tipo pequeñito como una chincheta, de 1,67, pero con unas piernas como robles. Por algo le llaman el Cohete de bolsillo y, desde ayer, de Lodosa también.

Es curioso porque a Ewan hemos estado a punto de no verle este año ni en Euskadi ni en ningún otro lado. Estaba quemado y apareció milagrosa y afortunadamente el Ineos para rescatarle. Completa en su palmarés un total de 65 victorias. Hasta el sábado, que concluye la Itzulia, espera que su equipo esté peleando por los puestos de la general, con Leonard. Por detrás vieron semejante exhibición los franceses Tronchon y Gruef, y el portugués Leitao. Era una jornada marcada a fuego por Aberasturi, ansioso por ser profeta en su tierra, pero el de Euskaltel Euskadi se tuvo que conformar con la novena plaza. Schachmann conserva el liderato, con Almeida grapado con el mismo tiempo y su compatriota Lipowitz a un segundo.

Final esperado en la etapa más larga de esta edición con cerca de 200 km. Toda ella transcurría por Navarra, desde Pamplona a Lodosa, la tierra del pimiento de piquillo, con el sol pegando de lo lindo para calentar hasta 25 grados. Aquí ganó la última vez Roglic en una contrarreloj que fue encumbrándole hacia la cima en 2018. Algunos llegaron a meta rojos como tomates, por el esfuerzo y los rayos que les castigaron durante el pedaleo. Tomaron protagonismo cinco corredores desde la salida y durante 183 km a lo largo de la etapa con constantes subidas y bajadas, pero solo un puerto puntuable de tercera categoría. Debido a razones de seguridad la organización realizó una modificación en el recorrido, se acortaron 13 kilómetros. Se eliminó el puerto de La Oliva y se sustituyó por San Martin de Unx de tercera. De ahí se bajaba a Olite dirección Pitillas y Santacara para enlazar con el recorrido original.

Un austríaco, Bayer, y cuatro españoles: Isasa, Arriola-Bengoa, Fernández y Uriarte lo intentaron con todas sus fuerzas y se asomaron a la meta, pero el pelotón, con el Ineos al frente pensando en Ewan, tenía perfectamente calculada la caza. El equipo hizo una gran carrera, primero controlando la etapa a la perfección, y al final guiando a su estrella perfectamente en las partes técnicas. Trabajó muy bien cuando tocaba para que su líder no dejara ni las migas. Los aventureros llegaron a amasar casi tres minutos de margen, pero el pelotón, a la espera y en alerta por un posible viento que finalmente no hizo estragos, tenía la situación bajo control. Uriarte, el único que inquietaba, se colocó líder provisional, ya que estaba a 1:11 en la general. Un momento emocionante, ya que estaba en su tierra y vestir el maillot de la montaña tiene que ser algo para recordar eternamente. Arriola-Bengoa, un debutante en la Itzulia y la élite, fue el primero en ceder, a 18 kilómetros para acabar, al sentir calambres. En el sorbo final, a 5,5 de la meta, lo intentó Isasa, en el paso por el puente sobre el río Ebro. Luego admitió que tenía piernas y tal vez si llega a arrancar antes se habría llevado la gloria. Pero la fuga estaba destinada a morir. Y así ocurrió a dos kilómetros de la raya final. Un acelerón en un repecho del campeón suizo Schimd puso a tiro a los escapados con respecto al gran grupo. El Soudal, el equipo del líder, cogió la responsabilidad en largas rectas.

Hubo un accidente cuando todos iban lanzados; todos iban intentando entrar hacia la cabecera y alguno salió de la carretera. Se fueron al suelo Campenaerts, Skjelmose, Grosschartner y Hayter se quedaron cortados cerca de los tres kilómetros finales en los que no se pican diferencias, por chocar con una moto de enlace perfectamente estacionada. Hubo montonera y se quedó gente cortada, aunque al final se les otorgó el tiempo de todos. Ese incidente deparó un final algo caótico, pero el líder iba bien protegido. En la última rotonda se estrechaba la ruta y Aberaturi perdió la posición y ya era imposible la remontada. Ewan se exhibió con enorme suficiencia. “Navarra es un paraíso para andar en bici”, celebraba Indurain en la etapa. El pentacampeón del Tour se ha acercado para “disfrutar” de un “día bueno”. Enorme campaña turística para la comunidad autónoma. La primavera que tanto iluminó a Ewan.

La de mañana, la tercera de la carrera, es una etapa salpicada de puertos cortos y explosivos con un par de ‘trampas’ en la parte final del recorrido de 156,3 km por Gipuzkoa entre Zarautz y Beasain. Sobre todo el muro de Lazkaomendi (1,4 km al 10 por ciento y tramos al 18), cuya cima está a 5,4 km de meta. Es tremenda una cuesta de 700 metros al 15,5 por ciento.

Será la última de las siete subidas puntuables, cinco de Tercera y dos de Segunda, entre los que también destaca la dureza de Santa Ageda (km; 9 km al 6,9 por ciento y tramos de hasta el 12) y Gaintza (km; 2,2 km al 10 por ciento y pendiente máxima al 20). Su último kilómetro y medio, durísimo, arranca al 20, continúa con un rampón de 800 metros al 16,5% y acaba al 18. Es más que probable que en Beasain se reduzca ya mucho la nómina de candidatos a lucir el amarillo el sábado tras la última etapa en Eibar.

Clasificación de la 2ª etapa

1. Caleb Ewan INEOS Grenadiers 04:13:50 (+10′‘)

2. Luca Van Boven Intermarché-Wanty (+6′‘)

3. Bastien Tronchon Decathlon AG2R La Mondiale (+4′‘)

4. Thibaud Gruel Groupama-FDJ m.t.

5. Iúri Leitão Caja Rural-Seguros RGA m.t.

6. Axel Zingle Team Visma | Lease a Bike m.t.

7. Fabio Van Den Bossche Alpecin-Deceuninck m.t.

8. Luc Wirtgen Tudor Pro Cycling Team m.t.

9. Jon Aberasturi Euskaltel-Euskadi m.t.

10. Anders Foldager Team Jayco-AlUla m.t.

Clasificación general

1. Max Schachmann Soudal Quick-Step 04:32:27

2. Joao Almeida UAE Team Emirates-XRG m. t.

3. Florian Lipowitz Red Bull-BORA-hansgrohe a 1 seg

4. Ethan Hayter Soudal Quick-Step a 6

5. Aleksandr Vlasov Red Bull-BORA-hansgrohe a 10

6. Ilan Van WilderSoudal Quick-Step a 11

7. Victor Campenaerts Team Visma a 12

8. Mattias Skjelmose Lidl-Trek m. t.

9. Bruno Armirail Decathlon AG2R La Mondiale a 13

10. Michael Leonard INEOS Grenadiers a 16

Arriola-Bengoa: “Es increíble debutar en la Itzulia y en el WorldTour”

Arriola-Bengoa (Caja Rural-Seguros RGA), uno de los grandes protagonistas de la jornada al formar parte de la fuga del día, dio por bueno el esfuerzo de toda la jornada, no en vano se trata de su debut en la Itzulia y en una carrera del WorldTour, algo “increíble” para el corredor guipuzcoano. “Hemos formado la escapada de salida en un día muy largo. Nos teníamos que dejar ver, intentar la victoria con Iuri Leitao y yo tenía libertad en la fuga. Ha sido un buen día, pero al pasar por meta a falta de 60 kilómetros fuimos a tope, y luego yo empecé a tener calambres a 20 de Lodosa. Era muy difícil llegar. Tenemos que intentarlo día a día”, dijo en meta el ciclista de Eskoriatza. Para el ciclista guipuzcoano la Itzulia será ya inolvidable, pues es su estreno en la carrera “de casa” y la primera del World Tour. “Para mí, estar viviendo la primera Itzulia y la primera carrera del WorldTour es algo increíble. Ayer fue un día muy bonito con la salida en Vitoria, y seguro que será una semana especial. Vamos a seguir intentándolo”, concluyó.

Isasa: “Tenía que haber arrancado antes, porque no iba mal”

Isasa admitió que se equivocó de estrategia. “Ha sido una pena. Al final fuimos delante a un ritmo muy bueno, pero pensamos que el pelotón nos cogería antes, y vimos que no, por lo que tiramos más fuerte. Lo intenté al final, pero tenía que haber arrancado antes porque no iba mal”, explicó Isasa en la meta de Lodosa. El último intento fue en vano, “pues pegaba fuerte el viento y el pelotón venía lanzado; no pudo ser”. “Delante íbamos conocidos, buenos amigos, y hubo entendimiento”, agregó.

Según el ciclista de Urretxu, de 23 años, quien fue protagonista en la fuga del reciente G.P. Indurain, se siente preparado para este tipo de largas aventuras. “Tengo piernas para estos trabajos prolongados, en abril me cuesta un poco, pero el otro día el G.P. Indurain me sentó bien, y hoy incluso me he sentido mejor; estoy contento”, señaló. Ante la jornada de montaña de este miércoles, Isasa espera que tanto él como su equipo vuelvan a ser protagonistas. “Mañana en Gipuzkoa a dejarse ver e intentar coger las escapadas. Me conozco toda la etapa, y será preciosa”, concluyó.

Uriarte: “Es especial llevar el maillot de la montaña en tu tierra”

Noticias relacionadas

Uriarte se sintió emocionado por haber formado del quinteto en fuga de la segunda etapa de la Itzulia y sobre todo por lucir en su tierra navarra el maillot de líder de la montaña. El corredor de Barañáin, de 23 años, explicó sus impresiones en la meta de Lodosa. “Llevar este maillot es especial, y más en tu tierra. Hemos salido de Iruña, de casa; para mí este debut es muy especial. Ayer lo intenté, quedé cerca, y hoy el objetivo era subir al podio”, explicó Uriarte.

A partir de ahora, y con la llegada de las etapas de montaña, será complicado que el navarro defienda el liderato de la montaña. “Ahora llegarán muchos puertos y defender el maillot será complicado, pero cuento con el equipo. A ver qué tal voy mañana, sobre todo, a disfrutar”, concluyó.

Etiquetado en:

Comentarios
Normas

Rellene su nombre y apellidos para comentar

Tu opinión se publicará con nombres y apellidos

Te recomendamos en Más Ciclismo