De una cirugía a corazón abierto al sueño olímpico

La historia de superación de Azizulhasni Awang (34 años, Malasia) es de esas que quedan grabadas en la retina. ‘The Pocket Rocketman’ (Hombre cohete de bolsillo), tal como es conocida esta superestrella del ciclismo en pista malayo, no sólo es uno de los grandes nombres que participan en la segunda edición de la UCI Track Champions League, ya que su peculiar situación le hace ser protagonista.

Y es que no es fácil digerir que después de erigirte en héroe nacional con dos medallas olímpicas (bronce en Río 2016 en el keirin y plata en Tokio 2020), tengas que pasar por el quirófano por un problema de corazón que desconocías durante toda tu vida. “Había algo anormal en mi corazón desde que nací, y mi médico se sorprendió porque he estado compitiendo al más alto nivel durante mucho tiempo sin problemas. Cuando fui a hacerme la tomografía, el cirujano me pidió que hiciera la cirugía lo antes posible, así que fue un gran momento para mí. Estaba tan deprimido a veces, pero tuve mucha suerte porque tuve un buen cirujano y un buen equipo que me ayudó a pasar por ese proceso”, relata en declaraciones a la organización de la Champions League el pistard malayo sobre su ardua experiencia.

Ahora, siete meses después de su operación, Awang está de vuelta al más alto nivel con la intención de seguir haciendo historia para su país en la que podría ser su última cita olímpica: “Mi sueño es ganar la primera medalla de oro para Malasia. Hasta ahora, nadie ha ganado una medalla de oro a nivel olímpico, por lo que mi trabajo es seguir entrenando más duro y esforzándome más. He venido a la Champions como parte de mi preparación para París 2024, donde espero poder ganar una medalla de oro para mi país”. Por ahora marcha 10º en la general de resistencia, pero con su férrea voluntad seguro que sigue cumpliendo sueños.