Van Vleuten, a por el repóker en el Giro Donne

Annemiek van Vleuten (Países Bajos, 40 años) está cada vez más cerca de su particular ‘The last dance’, cuya cita todavía se desconoce. Pero antes de colgar la bicicleta como profesional a la conclusión de esta temporada, la neerlandesa persigue con ambición más éxitos. Dentro de una temporada en la que no ha encontrado su mejor versión, y en la que aun así tiene la general de La Vuelta como única victoria, ahora aparece en su camino un Giro Donne (30 de junio al 9 de julio) en el que defenderá título sin la corredora más en forma del año, una Demi Vollering que ha decidido apostarlo todo al Tour de Francia, que arrancará sólo 14 días después de finalizar la ronda italiana. A menos de 24 horas de iniciar el asalto a la que podría ser su quinta gran vuelta consecutiva, la corredora del Movistar Team atendió a AS y otros medios en un encuentro virtual.

—¿Cuáles son sus sensaciones antes de iniciar el Giro?

—Emocionada, un poco nerviosa. He tenido una buena concentración en altitud para este gran objetivo. El Giro es muy diferente al Tour. Este Giro es mi objetivo principal y adoro correr en Italia. Hice altitud antes de Flandes. Haré esta vuelta y después iré al segundo paso de la temporada.

—¿Siente la presión de volver a ganar las tres grandes vueltas en un mismo año o está tranquila?

—Estoy un poco sorprendida por esta pregunta. Si haces algo excepcional, la gente te pregunta si vas a copiar algo excepcional. Ese nunca es mi objetivo. El año pasado fue superespecial. El objetivo es siempre dar lo mejor de mi misma junto a mi equipo.

—¿Qué rivales van a ser las más difíciles de combatir en este Giro?

—Normalmente, no hago esos análisis a los medios. Me concentro en mí misma. Si ves la lista de participantes, está Marta Cavalli, Mavi García… Como equipos, el SD Worx y también el Trek, con Longo Borghini y Gaia Reallini. Así que siento que va a ser una buena lucha.

—Se echan en falta altas montañas este año. ¿Qué opina del recorrido?

—La etapa cinco es un poco más dura, porque hay un puerto superduro (Passo del Lupo), pero está situado a 15 km de la salida. No me asusta, pero no sé si está etapa será en la que se puedan hacer más diferencias. En general, creo que esperaba puertos más difíciles. Me habría encantado subir el Gavia o el Stelvio una vez más, porque entreno mucho por allí, o también el Zoncolan. Estoy un poco decepcionada porque las etapas sí son un poco cortas. Deberían alargarlas acorde a los estándares del World Tour. Será una carrera agresiva.

—¿Afectó en algo su preparación la posibilidad de que se cancelara la carrera?

—No, no lo pensé. Lo aparqué y me concentré en mis nacionales. Si recibía la noticia de si se organiza o no, lo pensaría. Por supuesto, siempre está un poco en el fondo de tu mente. Es un poco decepcionante. Tienes la sensación de que el ciclismo femenino está subiendo, subiendo, subiendo, subiendo y luego sucede algo así. Se siente un poco como hace 10 años. Así que espero que sea la última vez que algo así suceda (el Giro Donne estuvo cerca de cancelarse por problemas económicos).

—Y después del Giro tendrá sólo 14 días para recuperarse antes del inicio del Tour.

—Esta carrera dura nueve días. Y luego, con etapas tan cortas, no me asusta en absoluto que necesite una recuperación larga. Creo que me llevará dos días tranquilos en altura y luego volveré a entrenar. Entonces, si te sientes súper en forma, no hay problema. Así que seguiré haciendo un bloque de entrenamiento adecuado después de este Giro en altura. Dejaré todas mis cosas en el hotel de los Alpes en el Passo Pascagno. Espero volver allí después de este Giro.

—Algunas de las compañeras que trabajarán para usted en este Giro son debutantes. ¿Cómo ve al equipo?

—Tenemos un muy buen equipo aquí. Es una buena mezcla de ciclistas. Traemos dos ciclistas fuertes también, Mackaij y Lippert. La nueva corredora es Sara Martín. Estoy feliz de que ella esté aquí como una joven ciclista. Es bueno para la experiencia también. Y una ciclista fuerte, quiere mostrar su buena forma. Creo que todas están aquí en un buen nivel de condición física y listas para competir.

—Respecto al recorrido, ¿os cuesta más a usted y al equipo controlar estas etapas de media montaña?

—Sí, claro. Si tienes que mirar a más ciclistas, es más difícil de controlar. Pero en ese sentido, creo que no es muy diferente al año pasado. Por eso también ataqué el año pasado bastante temprano, en la cuarta etapa, para reducir un poco las contendientes de la clasificación general. Creo que es más difícil para mí encontrar un momento para marcar la diferencia en este Giro, especialmente cuando miras a Gaia Realini, por ejemplo. Ya no hay contrarreloj (sólo 4 km) y tampoco muchas montañas. Entonces, sí, en general, creo que para mí es más difícil marcar la diferencia.

—Sin Demi Vollering en carrera, ¿cambian sus planes o estrategias?

-No, nunca ajusto mis tácticas a Demi Vollering. He ajustado las tácticas en general a equipos fuertes. Si miro la lista de salida aquí, tampoco es que solo ajustamos nuestras tácticas a SD Worx. Ganan mucho, pero sigo mirando a los otros equipos con mis tácticas. Porque es realmente peligroso concentrarse solo en uno, y luego un tercer corredor te gana.

—Parte con la opción de ganar cinco grandes vueltas consecutivas. ¿Lo ve posible?

—No quiero estar ocupada con eso. Es una pregunta que no es relevante, creo. Para mí no es un objetivo. Tampoco es algo que me haga feliz si lo logro. No me da ningún impulso ni energía adicional. Es bueno que los medios escriban de eso, pero para mí no tiene sentido.