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ŠKODA TITAN DESERT ALMERÍA

AS en la Titan Almería: batallas, miedo y el Velefique por caminos

Pablo Guerrero y Tessa Kortekaas ganan la etapa reina, con ascenso al coloso de La Vuelta y un descenso rapidisimo de 20 km.

Actualizado a
El equipo de AS en la Titan Almería.

En una carrera como la Škoda Titan Desert Almería, de cuatro etapas, casi 400 kilómetros de recorrido y un desnivel acumulado de más de 6.000 metros, todos los días libras una batalla contra ti mismo. Contra tu cuerpo que a las 05:45 dice que no te levantes después de haber dormido regular. Contra tus músculos, que te duelen por la fatiga. Contra tu cabeza que te recomienda que sería mejor parar... Pero hemos llegado hasta aquí para acabarla, voluntariamente, te recuerdas. Y al equipo de AS, a Marco González y al arriba firmante, les queda sólo una etapa después de salvar hoy la reina, con 97 km y más de 2.000 metros de desnivel. Bastante pimpantes para lo previsto, por cierto, tras 7h:14 sobre la bici.

Tessa Kortekaas, la neerlandesa afincada de España que marcha de líder, cree que Almería “es más dura por recorrido que Marruecos, aunque allí influye mucho el calor”. Una opinión en la que coinciden otros expertos en la prueba del Sáhara (de seis días). Debe ser por factores como el puerto de Velefique, que hubo que salvar hoy. Un coloso que se alza sobre los 1.820 metros de altitud, que ha sido meta de La Vuelta en dos ocasiones... y que aquí se sube por caminos, no por asfalto. Por cuestas de más del 20% donde, a veces, no queda más remedio que bajarse de la burra.

Y es que en Almería hay alta montaña. Pistas pizarrosas que te tiñen de negro las piernas mientras te deleitas con la vista del pueblito blanco de Senés y te das cuentas que llevas todo el desarrollo metido y no das para más. Un biker ha enchufado el móvil y suena ‘Mediterráneo’, lo que ayuda a evadirse un poco... Pero poco. La batalla se libra por no detenerte, por pensar en cosas bonitas, como el mar de Serrat.

“¡Una pedalada más es una menos para llegar!”, recuerda un experto. Y así es. Tras 15 km sin parar de subir, aparece la cima mientras vas detrás de Léster Fernández, cubano afincado en España con una discapacidad física superior al 80% que promueve el proyecto Happy Wheels para ayudar a personas como él. Apenas puede andar 20 metros apoyándose en muletas, va en silla de ruedas pero, sorprendentemente, puede pedalear. Su libertad. “Quiero demostrar que las personas con discapacidad podemos tener sueños y superar retos. Que el no, no existe”, repite con una sonrisa. Si Léster no se queja, qué nos vamos a quejar nosotros.

Jesús Mínguez, en un descenso.
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Jesús Mínguez, en un descenso.

Así que a abrigarse y para abajo: ¡20 kilómetros de descenso! Lajas de pizarra suelta, giros de 180º, velocidad, precaución (te pasa por la mente que hace un mes sufriste una luxación acromiocravicular en una caída y la zona está blandita)... Y navegación.

Porque la Škoda Titan Desert Almería no tiene señalización. Te orientas con el track que has cargado en tu GPS y llevas sobre el manillar. Consultarlo por el sendero se hace difícil. Y, de repente, te das cuenta de que estás bajando despendolado y solo. Sin nadie por delante ni por detrás. Parece que te has perdido. Y te entra miedo. Miedo de tener que subir ahora hacia arriba. O de sufrir un accidente. Mejor parar porque al compañero Marco le has perdido de vista. Un minuto después, aparece un participante y confirmas que vas bien, que ha sido un susto. Avituallamiento a 30 km de meta y a seguir por las pestosas ramblas y sus trampas de arena, navegando otra vez ya junto al colega del periódico. Solos. Porque el pelotón de 400 corredores (van unas 48 retirados) es un rosario. Pero resistir en la batalla es ganar. Queda un día.

LOS VENCEDORES DE ETAPA

El malagueño Pablo Guerrero, del equipo Scott Cala Bandida, asaltó con éxito la etapa reina de la Titan Desert de Almería en la que un gesto de compañerismo le permitió al segoviano Fran Herrero mantener la roja de líder.

En una jornada de gran dureza con el Alto de Velefique como principal dificultad, los bikers pudieron con los ruteros. El protagonismo fue para el líder Herrero, su compañero del Cannondale Miguel Muñoz y el malagueño Pablo Guerrero, quien aprovechó un gesto de solidaridad de los dos primeros para marcharse por la victoria.

Muñoz, el compañerismo al servicio del líder Fran Herrero marchaba con la rueda pinchada con la meta a 2 kilómetros, por lo que hubo que parar para arreglar la rueda. Muñoz, en vez de seguir la ruta a rueda de Guerrero, no abandonó al líder a su suerte y le acompañó hasta el final, para entrar juntos en la llegada del circuito a 33 segundos del ganador.

La cuarta plaza fue para Luis León Sánchez, a 2.40 minutos, y Ángel Luis Maté, quien fue el mejor en la escalada de 18 km a Velefique, donde bonificó 1 minuto de premio, se hundió en el descenso y perdió 18 minutos en meta.

En femenina, triple de la neerlandesa Tessa Kortekaas, del Cannondale VAS Arabay, imbatible e intratable un día más. La extriatleta dominó a su antojo logrando diferencias definitivas. Aventajó en más de 12 minutos a las españolas Pilar Fernández y Ariadna Ródenas.

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