El Fuerte Al Rustaq, que otrora sirvió de fortaleza amurallada de privilegiada posición estratétiga, por su ubicación entre mar y montañas, acogió el feliz regreso del Tour de Omán. Una primera etapa, reservada para los velocistas, donde los principales candidatos al triunfo no faltaron a la batalla. Y eso que no era una llegada propicia para los esprinters más puros, con una pequeña cuesta final de unos 300 metros en torno al 2% de pendiente donde brilló Fernando Gaviria. El colombiano, con una superioridad tremenda, batió a Mark Cavendish y a Kaden Groves, sus acompañantes en el podio.

De salida se formó una fuga de tres corredores, con el español Peio Goikoetxea (Euskaltel) escoltado por Jan Dunnewind (Team Novo) y por Al-Wahibi, que dejó ver con orgullo la equipación nacional de Omán. Entre áridas montañas, extensas llanuras y multitud de dromedarios (por número, el equivalente a ovejas y cabras por estos lares) transcurrió una etapa que el pelotón controló a la perfección de principio a fin. En poco más de tres minutos quedó estabilizada su máxima renta cuando el pelotón, comandado en cabeza durante casi todo el día por el UAE Team Emirates, aceleró el paso con furia. El conjunto emiratí sabía lo que hacía...

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Atrapada la fuga a unos 10 km de la meta (Goikoetxea se llevó el liderato de la combatividad como último superviviente), la victoria se decidió en las inmediaciones del Centro de Exposición y Convenciones de Omán, construcción al más puro estilo 'pabellón NBA', donde Gaviria se impuso al esprint para ser el primer líder de la carrera. "¿Tienen una mascarilla, por favor? Pero que no sea del Euskaltel", bromeaba feliz el colombiano en la zona de podio con un auxiliar del conjunto vasco, que finalmente le prestó el esencial complemento. Toda precaución es poca, y bien lo sabe un Gaviria al que su positivo en covid-19 le apartó de las carreteras durante mucho tiempo, y también de su mejor golpe de pedal.

"Estoy realmente feliz por esta victoria. Mi equipo trabajó muy bien hoy para que estuviera lo más delante posible. En la última parte, Max (Richeze) controló la situación al 100% para que no pierdera metros, pude apretar a tope y eso marcó la diferencia. Aquí llegué con la intención de ganar una etapa y lo he conseguido", explicó Gaviria a AS y el resto de medios presentes al concluir la carrera. El colombiano se acerca a las 50 victorias como profesional (48), consiguiendo lo que no pudo alcanzar la pasada semana en el Saudí Tour (dos veces en el top-5). El UAE golpea primero en Omán.

Clasificación general

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