CICLISMO | DE PANNE

Sam Bennett impone su ley

El irlandés fue el mejor en la llegada masiva. El Movistar lo intentó con ataques de Sebastián Mora y Luis Mas, pero no tuvo suerte ante el pelotón.

0
Sam Bennett impone su ley
Deceuninck

El irlandés Sam Bennett (Deceuninck Quick Step) se impuso este miércoles al esprint con absoluta superioridad en la 45 edición de la clásica belga Brujas La Panne, con un recorrido de 203,9 kilómetros, que se decidió entre los mejores velocistas. Bennett, de 30 años, firmó su quinta victoria de la temporada demostrando que actualmente es el hombre más rápido del pelotón, con una fuerza concluyente que le permitió alzar los brazos con un tiempo de 4h.27.30, por delante del belga Jasper Philipsen (Alpecin Fenix) y del alemán Pascal Ackermann (Bora Hansgrohe).

Bennett, maillot verde del Tour 2020 y reciente vencedor de dos etapas en la París Niza y otras dos en el Tour de los UAE, cumplió el pronóstico que daba el protagonismo a los hombres bala, y lo hizo con firmeza, aprovechando su dulce estado de forma y el trabajo de su equipo, implacable en el último kilómetro, dejando a su velocista en las mejores condiciones para rematar la faena.

La denominada Oxyclean Brujas La Panne, en el World Tour desde 2019 y antes conocida como Tres Días de La Panne, comenzó con la fuga de 6 hombres que no lograron romper los planes de un pelotón interesado en la definición al esprint, de ahí que la clásica concentrara en su listado de inicio a los mejores esprinters del mundo.

Exenta de pavé, esta carrera tenía como siempre el aliciente del viento predominante en la zona de Moeren, donde las rachas de costado han decidido más de una edición. Sin incidencia del aire la carrera se empezó a animar de nuevo con constantes ataques, uno de ellos con el "pistard" olímpico Sebastián Mora (Movistar) al mando. El ciclista de Villarreal, con el objetivo puesto en Tokio, se probó en solitario, pero el Deceuninck y Bora se emplearon a fondo para evitar aventuras innecesarias. Mora fue atrapado a 46 de meta.

Movistar lo volvió a intentar con Lluis Mas a 25 de meta, junto al italiano Davide Martinelli, con la suerte echada ante un pelotón que ya marchaba con los dientes afilados para propiciar el esprint. Algunos intentaron la rebelión tardía, como el belga Brent Van Moer, víctima de una carrera que ya se había vuelto loca en cabeza.

Tremenda pelea en la aproximación entre los equipos interesados en el esprint. El Deceuninck, siempre atento, dejó hacer al Alpecin, Bora, Groupama y otros, pero a falta de 1500 metros "la manada de lobos" tomó cartas en el asunto para imponer su tren con hasta 6 hombres en cabeza. Uno a uno se fueron apartando, hasta que Sam Bennett apareció implacable para acelerar a fondo a 200 metros de la pancarta de meta. Aguantó unos metros de ventaja, los suficientes para dar a su equipo la victoria número 12 de la temporada.