Llega la última gran carrera por etapas en 2018. Tras el Giro de Italia, que coronó a Chris Froome con la maglia rosa, y el Tour de Francia, que concluyó con Geraint Thomas (ambos del Sky) consiguiendo su primera grande. Ahora, turno para la Vuelta a España. Con la presencia de Chris Froome casi descartada, la ronda española busca su sucesor. 21 etapas para completar un total de 3.254 kilómetros con inicio en Málaga, el 25 de agosto, y final en Madrid, el 16 de septiembre.

En cuanto al recorrido, habrá seis etapas llanas y dos llanas con final en alto, seis etapas de montaña, cinco etapas de media montaña y dos etapas de contrarreloj individual. 46 puertos de montaña y dos días de descanso. La salida oficial de La Vuelta 2018 será la 30ª visita de la ronda española a Málaga capital. La primera fue en 1936, segunda edición de La Vuelta, con una salida y una meta rumbo a Granada y desde Sevilla, respectivamente. La carrera mantiene el mismo formato de bonificación, que premiará con 10, 6 y 4 segundos a los tres primeros de cada etapa, respectivamente, y con 3, 2 y 1 segundo a los primeros corredores en pasar por cada sprint intermedio.

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Además de por ser líderes de la general, los ciclistas pelean también por la clasificación por puntos o por ser los mejores escaladores de cada edición. Los puntos se entregan según el siguiente sistema: obtiene 25 puntos al primer clasificado de etapa, 20 el segundo, 16 el tercero, 14 el cuarto, 12 el quinto y luego desde 10 hasta 1 entre el sexto y el decimoquinto. Los sprints intermedios premian con 4, 2 y 1 punto a los tres primeros ciclistas en superar cada uno. 10 salidas y nueve metas inéditas en esta Vuelta a España 2018.

Recorrido por etapas y perfiles de la Vuelta a España 2017

Etapa 1: Málaga - Málaga, 8 kilómetros. CRI llana (25 de agosto)

La Vuelta a España 2018 comenzará con una contrarreloj individual con un pequeño repecho que, en principio, solo servirá para designar al primer líder de la general. Las diferencias serán mínimas entre los 176 corredores que tomen la salida en el prólogo malagueño, individual por primera vez desde hace 9 años.

Etapa 2: Marbella - Caminito del Rey, 163,5 kilómetros. Llana (26 de agosto)

Una de las dos etapas llanas con final en alto de esta Vuelta a España 2018. Final propicio para que algún escalador, sin ser puro, se alce con el triunfo con el Alto de Guadalhorce. Esteban Chaves, ausente en esta edición, logró aquí la victoria en 2015 aunque en esta ocasión el final se ha trasladado y será en el Centro de Visitantes de Caminito del Rey. No se esperan grandes diferencias entre los principales hombres de la general aunque deberán estar atentos.

Etapa 3: Mijas - Alahurín de la Torre, 178 kilómetros. Media montaña (27 de agosto)

Llegada propicia para los sprinters, que no tendrán muchas oportunidades en esta Vuelta, y eso que deberán superar un puerto de primera categoría. Será el Puerto del Madroño, pero al principio de la jornada (kilómetro 45) por lo que no debe romper la carrera.

Etapa 4: Vélez-Málaga - Alfácar (Sierra de la Alfaguara), 161 kilómetros. Media montaña (28 de agosto)

Última jornada por tierras malagueñas en la que los favoritos deberán estar muy atentos. Habrá dos puertos de primera categoría. El primero de ellos, tras disputar 66 kilómetros, será el Alto de la Cabra Montés mientras que el segundo será ya en meta, el puerto de Alfacar. A simple vista, no parece muy duro para los profesionales, pero se esperan más diferencias que en Caminito del Rey. Es una subida clásica que descarta a algún favorito en la primera semana.

Etapa 5: Granada - Roquetas del Mar, 188 kilómetros. Media montaña (29 de agosto)

Otra ocasión, de las escasas que hay en esta Vuelta, para los sprinters... y tendrán que trabajárselo duramente. Dos puertos, uno de tercera y otro de segunda categoría (hará selección en el grupo), con una final marcado claramente por el largo descenso (alrededor de veinte kilómetros) camino de Roquetas. Los expertos en este tipo de terreno tendrán su oportunidad mientras que los equipos de los velocistas buscarán mantener un ritmo que permita disputar la victoria al sprint.

Etapa 6: Huércal-Overa - San Javier. Mar Meno, 155 kilómetros. Llana (30 de agosto)

Una de las oportunidades más claras para llegada al sprint en esta Vuelta. El Alto del Garrobillo y el Alto del Cedacero, ambos de tercera categoría, no deben ser suficientes para romper la carrera. Cuidado especialmente en la zona de San Javier con los fuertes vientos, aunque en agosto, con las presumibles altas temperaturas, no debería suponer un gran problema.

Etapa 7: Puerto-Lumbreras - Pozo Alcón. 185 kilómetros. Llana (31 de agosto)

Previsible llegada en grupo y sprint para decidir el vencedor. Habrá dos puertos de tercera, estando el último de ellos a doce kilómetros de meta (Alto de Ceal, 3ª). Esta subida debe seleccionar el pelotón a una centena de corredores, que llegarán al tramo final con la victoria de etapa en juego. Parece muy complicada la opción de fuga y más en la primera semana.

Etapa 8: Linares - Almadén, 195 kilómetros. Llana (1 de septiembre)

Cambio de mes y última etapa de esta Vuelta por tierras andaluzas. Sin excesivas dificultades, afrontando únicamente el Alto de Españares (3ª categoría). Al ser más larga que las anteriores, la fuga buscará su oportunidad en un recorrido que, con buenos rodadores en la mencionada escapada, pueden poner en serias dificultades al pelotón. Si el grupo lo controla, estaremos ante una de las últimas oportunidades para los velocistas.

Etapa 9: Talavera de la Reina - La Covatilla, 200 kilómetros. Montaña (2 de septiembre)

Última etapa de la primera semana... y primer día de montaña puro antes de la jornada de descanso. Después de afrontar un traslado entre Almadén y Talavera de la Reina, los corredores afrontarán la salida en la, por historia, calurosa ciudad cuya cerámica es característica. Hasta cuatro puertos, por este orden. Puerto del Pico (1ª) con sus duras y largas curvas, el Alto de Gredos (3ª), el Puerto de Peña Negra (2ª) y meta en una ilustre subida, La Covatilla, de categoría especial. Jornada larga y dura en la que los favoritos deben dar el primer golpe sobre la mesa.

Etapa 10: Salamanca - Fermoselle-Bermillo de Sayago, 177 kilómetros. Llana (4 de septiembre)

Etapa propicia para las escapadas después de la jornada de descanso y tras la gran primera etapa de montaña de la Vuelta 2018. Pequeño desplazamiento a Salamanca y salida con un pequeño puerto de 3ª categoría (Alto de Fermoselle) a treinta kilómetros de la localidad zamorana. Parte final compleja, lo que complicará la labor de los equipos de los velocistas.

Etapa 11: Mombuey - Ribeira Sacra. Luintra, 207 kilómetros. Media montaña (5 de septiembre)

La jornada más larga de esta edición, lo que suele ser, habitualmente, sinónimo de victoria para una fuga. Un terreno muy sinuoso, con tres puertos de tercera y uno de segunda, que dificultará y mucho el trabajo de los equipos para un remoto sprint, ya con las piernas castigadas. Final propicio para que los favoritos llegan a meta en un pequeño grupo, como ocurriera en 2016.

Etapa 12: Mondoñedo . Faro de Estaca de Bares. Mañó, 181 kilómetros. Media montaña (6 de septiembre)

Etapa muy engañosa en tierras gallegas. El recorrido, a simple vista, puede ser bueno para los sprinters pero se medirán a un terreno muy quebrado que generará mucho desgaste (más el ya acumulado en el ecuador de la carrera). Dos puertos, ambos de tercero, en los que los velocistas buscarán tener controlada a la fuga, aunque se antoja complicado.

Etapa 13: Candás-Carreño - Valle de Sabero. La Camperona, 174 kilómetros. Montaña. (7 de septiembre)

Día muy duro en el que los favoritos a la general tendrán trabajo y en el que habrá diferencias en el tramo final: La Camperona. El Alto de la Madera (3ª) al poco de empezar servirá para formar la fuga, mientras que en el Puerto de Terma (1ª) a 70 kilómetros de meta, el grupo se puede seleccionar. Serán probables los intentos de fuga, aunque los equipos de los favoritos trabajará para que uno de sus líderes alce los brazos en tierras cántabras.

Etapa 14: Cistierna - Les Praeres. Nava, 171 kilómetros. Montaña (8 de septiembre)

Jornada para el deleite de los escaladores en el segundo día de los tres previsto por el duro tríptico asturleonés. Antes de meta en el inédito puerto de Les Praeres, cuatro ascensiones (dos de primera) con descensos técnicos que a buen seguro provocarán una selección en la carrera. Después, en la subida final, tramos que supera el 20% de pendiente en el día de Asturias, una gran motivación para los corredores de la tierra. La fuga buscará sus opciones y los equipos de los gallos, proteger a sus líderes.

Etapa 15: Ribera de Arriba - Lagos de Covadonga. Centenarios 2018, 178 kilómetros. Montaña (9 de septiembre)

Hasta 4.000 metros de desnivel en uno de los días más duros de la Vuelta a España 2018. Tercer día consecutivo de dura montaña con final en una ascensión mítica en la ronda española: los Lagos de Covadonga. El Alto de San Emiliano (3ª) al poco de comenzar, no debería suponer una mayor ascensión, pero una doble ascensión al Mirador del Fito (1ª) provocarán que la carrera esté muy seleccionada antes de la dura subida a Lagos. Día clave para la general.

Etapa 16: Santillana del Mar - Torrelavega, 32 kilómetros. Contrarreloj individual (11 de septiembre)

Un trazado para especialistas en la lucha contra el crono. El recorrido y el terreno serán perfectos para que los contrarrelojistas que hayan sobrevivido al complejo tríptico asturleonés marquen diferencias importantes con los escaladores de cara a la traca final.

Etapa 17: Getxo - Balcón de Bizkaia, 157 kilómetros. Media montaña (12 de septiembre)

Una etapa sin ninguna duda con el sello de la Vuelta aunque con un puerto más largo que en otros finales explosivos. En total. seis puertos por tierras vascas (cuatro de tercera, dos de segunda y el final en el Bálcón de Bizkaia, de primera categoría). Más de 3.000 metros de desnivel durante el día y tramos del 17% y 18% de pendiente en la ascensión final.

Etapa 18: Ejea de los Caballeros - Lleida, 186 kilómetros. Llana (13 de septiembre)

Traslado de hasta Ejea de los Caballeros para una jornada de respiro para los hombres de la general. Con casi toda seguridad se formarán una escapa de calidad y los equipos de los sprinters verán si tienen la suficiente fuerza a estas alturas de la carrera para que la etapa se decida en una llegada masiva en Lleida. Etapa sin puertos con mucho desgaste acumulado.

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Etapa 19: Lleida - Andorra. Naturlandia, 154 kilómetros. Llana con final en alto (14 de septiembre)

Recorrido tranquilo y llano en el que el pelotón llegará agrupado hasta el tramo final, con la ascensión al Col de la Rabassa (1ª) dónde un ataque a un kilómetro (o menos) se antoja como la forma en la que se decidirá la etapa. Al día siguiente espera una dura jornada, por lo que los favoritos se reservarán.

Etapa 20: Andorra. Escaldes-Engordany - Coll de la Gallina. Santuario de Canolich. Montaña (15 de septiembre)

Traca final para decidir al ganador de la Vuelta a España 2018. Etapa corta pero terrible para los corredores que queden en carrera, con un alto desgaste acumulado y cinco puertos más el temible final en el Col de la Gallina, de categoría especial. . El pelotón subirá La Comella, Beixalis, Ordino, Beixalis, la Comella de nuevo y La Gallina, acumulando 4.000 metros de desnivel. El líder de la Vuelta estará ante su última prueba para mantener el rojo antes de Madrid. Si no llega con una buena renta, sus perseguidores tendrán trazado suficiente para dar una vuelta a la carrera.

Etapa 21: Alcorcón - Madrid, 100 kilómetros. Llana (16 de septiembre)

Largo traslado desde Andora hasta Alcorcón antes del trayecto final por la capital española. Jornada definitiva para los homenajes en los ganadores de las diferentes categorías, especialmente al portador del jersey rojo, y a todos los que culminen tres exigentes semanas. Recorrido corto, en el que se rodará lento, pero con un sprint intermedio y una llegada para los velocistas explosivos que puede decidir la lucha por el maillot verde, tal y como ocurrió el año pasado. Posteriormente, la Cibeles coronará a los vencedores.