Fuglsang se aprovecha del marcaje entre Roglic y Bernal
El danés ganó en solitario la etapa reina del Tour de Romandía tras atacar a los gallos favoreciéndose de su marcaje. Roglic fue segundo y Bernal, tercero.
Épico. Ese es el mejor adjetivo que define la pelea que tuvieron Primoz Roglic y Egan Bernal en la ascensión al Basse-Nendaz. Era la última de la etapa reina del Tour de Romandía y mostraron que son los más fuertes de la carrera. Nadie les aguantó hacia arriba y su pelea fue máxima, pero todo cambió en la bajada. Faltaban más de 20 kilómetros para la meta y no quisieron arriesgar. Lo aprovecharon Porte, Rui Costa y Fuglsang para conectar, aunque algunos sufrían. El que más fue Fuglsang, quien se cortó en varias ocasiones, pero cuando el terreno volvió a tener una pequeña cuesta, atacó.