La aparición de los frenos de disco en el pelotón suma un nuevo capítulo de polémica. Después del riesgo que supone este mecanismo en caso de producirse caídas (como el corte que sufrió Fran Ventoso durante la pasada París-Roubaix), otra desventaja que tiene esta herramienta es el calor que acumulan, que podría provocar quemaduras en la prenda o la piel de los corredores en caso de contacto.

Reinier Honig, ciclista del equipo austriaco Voralberg, de categoría continental, mostró en su vídeo el riesgo que supone que un freno caliente roce al corredor. Para ello, después de un entrenamiento, Honig virtió agua de un bidón sobre el freno, y en ese momento soltó vapor mientras se refrigeraba. La protesta de Honig llegó al pelotón y el ciclista del Sky Wout Poels compartió el vídeo de su compatriota con un claro mensaje a la UCI.

Cuatro victorias con bicis con frenos de disco en 2017

Sin embargo, no todo son quejas hacia los frenos de disco en el pelotón. En lo que va de 2017, dos corredores del equipo Quick-Step, Tom Boonen y Marcel Kittel, han logrado hasta cuatro victorias de etapa entre ambos con bicicletas equipadas con este mecanismo en la Vuelta a San Juan (Boonen) y en el Tour de Dubai (tres victorias de etapa y la general para Kittel). De hecho, el ciclista alemán se sintió satisfecho con el rendimiento de los frenos, y considera que su implantación "es un avance muy importante".