Matthews repite victoria tras la sucia maniobra de Bouhanni

No cruzó el primero la meta de Commentry, pero no había dudas de que era el vencedor. Michael Matthews (Orica) sumó su segunda victoria en la París-Niza, tras la descalificación de Nacer Bouhanni (Codifis) por una sucia maniobra durante el sprint. El australiano también aumentó así su ventaja al frente de la general, con 14 segundos sobre Tom Dumoulin, en la víspera de la primera llegada en alto: Mont Broully (3 km al 7,7%). Alberto Contador entró cortado y perdió 5 segundos con el ganador y 4" con los principales favoritos.

La segunda etapa de la París-Niza (213 km) tuvo la tradicional historia de una jornada al sprint. Para empezar, una escapada larga: Brändle (IAM), Siskevicius (Delko Marseille), Delaplace (Fortuneo) y Grmay (Lampre) saltaron en el km 0 y los dos primeros aguantaron hasta que restaban 12 km, por lo que estuvieron 201 en fuga. El nerviosismo se activó en la última parte, en la que Pierre-Luc Perichon sufrió un aparatoso accidente y arrolló a un espectador.

Así se llegaba al sprint. El Cofidis tomaba la cabeza para colocar a Bouhanni, que el día anterior había sido tercero y había presenciado la victoria de su ‘odiado’ excompañero Arnaud Démare. El francés lideraba la carrera con Michael Matthews bien colocado a su rueda. Cuando el maillot amarillo buscó la remontada por su izquierda, pegado al lateral, el boxeador Bouhanni sacó el codo y le cerró hacia las vallas. El australiano salvó la verticalidad milagrosamente y cruzó la meta recriminando su acción al francés. Los jueces no tuvieron ninguna duda y le descalificaron incluso antes de la ceremonia del podio.

Matthews se embolsó también los diez segundos de bonificación y llega a la primera de las dos llegadas en alto con una ventaja de 14 segundos sobre Tom Dumoulin; 19" sobre Ion Izagirre y Geraint Thomas; 27" sobre Rafal Majka y Richie Porte; 33” sobre Alberto Contador... La etapa enlaza cinco puertos de tercera y dos de segunda, el último de ellos con la meta en Mont Broully, una subida corta (3 km), pero con una pendiente en aumento y un último kilómetro al 9,3%. El australiano ha ganado en repechos como Arcos de la Frontera y Montecasino. Habrá que ver si es capaz de defenderse también aquí.