Purito: "La moral sigue alta, ahora nos toca remontar"

Bien pertrechado para combatir las inclemencias de Irlanda del Norte, con perneras, guantes térmicos, chubasquero de neopreno y visera bajo el casco, Purito Rodríguez recobró su buen humor en la salida de la segunda etapa del Giro: “Otra vez lo mismo, más lluvia. Cómo me gusta. No me entretengáis que no me apetece perseguir desde el principio”. Al terminar, Quim destacaba la dureza de estos dos días en Belfast: “Tanta agua y tanto frío van a pasarnos miga. El pelotón rodó rápido, hubo tensión y caídas. Cubrí el expediente sin mayores sobresaltos”. En Twitter incidió con ironía: “Amigos del Tour, Giro y Vuelta, ¿por qué no hacéis un año la salida de vuestras carreras en Hawaii, Maldivas o Riviera Maya?”.

El jefe del Katusha ya ha asimilado la pérdida de tiempo con la que ha comenzado después de la crono por equipos: “No se trató de un mal síntoma, sino de algo incontrolable por culpa de la climatología. Ahí no podemos cambiar nada, como tampoco el orden en el que nos colocaron para partir. Aunque nuestro grupo se encontraba bien, nos afectaron las caídas de Vorganov y Gusev y cogimos un poco de miedo con el suelo mojado”.

Su cabreo el sábado era considerable. Tras cruzar apenas tres frases con los periodistas en la meta (“muy jodido, muy duro, muy cansado”), Purito escribió en su página de Twitter: “No voy a esconder mi pena por cómo ha ido, pero esto es lo que hay. Ante un día así no puedes hacer nada. Seguiremos luchando”.

El catalán mantiene el mensaje esperanzador y confía en sus opciones: “Evidentemente, la situación no es la ideal para iniciar una grande. Sin embargo, esto no ha hecho nada más que empezar. Ahora toca remontar. La moral está bien y poco a poco habrá que intentar recuperar la desventaja respecto al resto de los favoritos”. En la general, Urán le saca ­­1:28­, Cadel Evans, 1:26; Roche y Majka, ­1:10; Scarponi, 55 segundos; y Quintana, 38: “Faltan todavía muchas jornadas de montaña por disputar, así que ya veremos cómo acaba”.

José Azevedo, su director, también se mostró optimista: “Quedan 3.500 kilómetros por delante y el objetivo se mantiene igual: intentar conquistar este Giro con Joaquín. La ilusión sigue intacta”. Los socios españoles, Dani Moreno, Alberto Losada y Ángel Vicioso, tampoco dudan del espíritu combativo de su líder: “Purito mira al futuro y a las ocasiones que puedan presentarse para meter tiempo”. De momento, Quintana y Purito ganan por goleada en cuanto a presencia en los medios de comunicación y atención del público. No en vano, se les considera los dos máximos aspirantes a lo más alto del podio de Trieste.