Vuelta a España
Tres fallos en la localización conllevan una suspensión
Cometer tres irregularidades sobre las normas de ubicación en un plazo de 18 meses conlleva una sanción de dos años. Los ciclistas deben estar localizables.
Los ciclistas están obligados por el Sistema ADAMS a comunicar a la UCI y las agencias antidopaje su localización diaria e indicar una franja de una hora en la que se encuentran disponibles para ser controlados. Cada agencia sólo tiene acceso a los datos de sus deportistas. Los inspectores entran con su software, eligen un corredor, introducen su contraseña y ven su información y situación geográfica, que ha debido quedar registrada. Todo funciona por internet, como los mails que se cruzó Horner con la USADA.
Cometer tres irregularidades sobre las normas de ubicación en un plazo de 18 meses conlleva una sanción de dos años. Estas infracciones van desde retrasos en la redacción del programa a dejar de informar sobre el paradero. En las últimas temporadas han sido suspendidos a cuenta de sus fallos con el Sistema ADAMS el danés Alex Rasmussen (Garmin), con 18 meses, y el francés Yoann Offredo (FDJ), con un año.