Chris Froome hace balance en L'Equipe de balance su extraordinario iniciop de temporada que le ha llevado a ganar las vueltas a Omán, Critérium Internacional, Romandía y quedar segundo en la Tirreno-Adriático. Unos resultados incluso mejores que los que cosechó el año pasado Bradley Wiggins, su compañero en el Sky, que culminó ganado el Tour de Francia.

“Evidentemente, estar junto a  Wiggins el año pasado ha tenido su repercusión en mi forma de trabajar este año. Pero yo no intentaba duplicar la temporada que Brad hizo el año pasado. Sino en controlar mis fuerzas, dosificar el trabajo y encontrar los puntos en los que aún puedo progresar. La victoria es una consecuencia, no un objetivo en sí mismo. El Tour de Romandía, por ejemplo, no era un objetivo”, explicó .

Froome dejó bien claro que su preparación y entrenamientos van absolutamente "enfocados al Tour de Francia que es la prioridad". Aunque apunta que la experiencia en Romandía le ha servido de mucho. "He aprendido a vivir en la piel de un líder, no sólo en el pelotón, sino también en la gestión de después de la carrera, en el podio, el control antidopaje, la conferencia de prensa. Llegaba todas las noches al hotel muy tarde, nunca me fui a la cama antes de la medianoche. Cómo no interferir con el tiempo de recuperación es el problema que tengo aprender a dominar. Y son los ajustes que tengo que hacer para el Tour”

En cuanto a la preparación que le ha marcado Tim Kerrison, entrenador del Sky, explica que el principal objetivo es mantener el equilibrio para que su peso y su potencia "estén siempre en el punto óptimo". "Ya lo consiguió con Brad y esto sirve de referencia conmigo. Es un modelo que funciona. Podemos ganar carreras en una época temprana, sin comprometer el mes de julio. Funciona con nuestro propio sistema, basado en bloques de entrenamiento de dos semanas en Tenerife”.

 La única sombra en este tiempo feliz que vive Froome, llega por las sospechas de algunos que sólo pueden comprender los extraordinarios resultados del Sky con un supuesto dopaje. "Entiendo que se hagan cierto tipo de preguntas. Pero la verdad es que yo no he pensado en que quizás tenga que preparar una línea de defensa. Estoy un poco triste por pensar que tengo una vida sana y sincera en mi trabajo y que aún puedo ser cuestionado como si este no fuera el caso”.