Taylor Phinney se puso la primera maglia rosa

Taylor Phinney, nació en Boulder (Colorado, Estados Unidos) hace 21 años. Pero reside en Lucca (Toscana, Italia) durante gran parte de la temporada. Habla perfectamente en italiano y soñaba con enfundarse la maglia rosa en Herning: "Amo Italia, amo su cultura, sus costumbres, y amo el Giro". Su devoción se ha visto recompensada. Tras memorizar al dedillo las 17 curvas de la crono de 8,7 km, como señaló hace tres días en su twitter, superó el tiempo de Geraint Thomas para convertirse en el primer líder de la carrera.

Taylor Phinney es doble campeón del mundo en persecución individual, un consumado especialista en pista y contrarreloj, como Thomas. Pero también le van las piedras, como demuestran sus dos triunfos en la Roubaix Sub-23. La afición por la bici le viene de familia: su padre, Davis, ganó dos etapas en el Tour y su madre, Connie Carpenter, fue ciclista y patinadora de velocidad.

Entre los favoritos, Purito realizó una de sus mejores actuaciones contra el crono. Sólo cedió siete segunditos ante Kreuziger, y cuatro con Basso. Pero es que le metió 16 a Frank Schleck, 21 a Cunego, 23 a Scarponi, 24 a Rujano y 33 a Gadret. El Giro no ha hecho más que empezar, sin embargo, ni él mismo se habría imaginado marcando diferencias en una disciplina que odia con todas sus fuerzas.