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El equipo español completa su primer reconocimiento al circuito australiano
Freire, por su parte, reconoce que "la llegada es buena" para él. Este lunes, el plan de la selección será similar al del sábado, con un entrenamiento de dos horas o dos horas y media por las afueras de Geelong.
El equipo español que competirá en el Mundial de ciclismo en ruta de Melbourne el próximo fin de semana ha completado su primer reconocimiento al circuito que acogerá la competición durante el segundo día de entrenamientos en territorios australiano.
Tanto los profesionales, como las féminas y los sub-23 dieron dos vueltas al recorrido, mientras que luego los contrarrelojistas reconocieron también el circuito de sus cronos, que parcialmente coincide con el de la línea, salvo en la primera subida, según informó ''rfec.com''.
Fue precisamente esa primera ascensión, de algo más de un kilómetro, la que más impresionó a los corredores, en especial a Juanma Gárate.
"Al principio todos nos hemos sorprendido pues es más exigente de lo que esperábamos, aunque la segunda vez que la hemos afrontado nos ha dado una idea más clara de lo que es. A diferencia del recorrido del año pasado, éste tiene bastantes tramos de llano en los que es posible recuperar. Y el viento que puede ser decisivo, ya que si sopla de frente en los repechos será imposible que nadie se vaya adelante solo, pero si da de espalda, puede ser muy peligroso", avisó.
Tras esa primera subida, una bajada pronunciada antes de entrar en la ''chicane'' que evita el paso por el puente estrecho. "Mejor así -comentó Freire- porque si no podía ser muy peligroso". Con esta variante se arranca mas lento para la segunda subida, aunque no debe ser decisiva ni por su longitud -unos 600 metros- ni por su lejanía de meta, unos cinco kilómetros.
Y de allí, bordeando la costa hasta la última curva a derechas, para afrontar la recta de llegada, que ''pica'' bastante. "La llegada es ideal para Oscar -añade Gárate-. El viento soplará de cara y no es necesario estar delante. Puedes ir sobre el puesto 30 que hay tiempo para remontar".
Freire, por su parte, reconoce que "la llegada es buena" para él. "Lo importante es llegar en condiciones a ese final. Todos los Mundiales tienen su punto de dureza y este es diferente respecto al del año pasado en los repechos, quizá con los mismos porcentajes, pero más cortos. Desde luego va a ser más rápido, con más posibilidades de recuperación y bastante improbable que ataque un corredor en solitario, aunque eso dependerá del viento", explicó.