Ponsarnau regresa a Zaragoza sin afán de revancha
“Es un sitio donde resulta muy difícil que al entrenador le salgan las cosas bien”, destaca antes de su visita con el Bilbao Basket.
Ocampo, la ‘Oveja’ Hernández, Casimiro, Ponsarnau, Sakota, Schiller y Fisac. Siete entrenadores en algo más de dos años. Ese es el río revuelto del Zaragoza. El director deportivo, Muedra, se largó cuando despidieron a Schiller, por coherencia, ya que era el técnico que puso y en el que confiaba y no quería ver más quebrada su autoridad. Al final, mil vueltas para volver al origen, a un Fisac que ha sido uno de los pocos que ha encontrado estabilidad en los últimos tiempos en el Casademont. Un entrenador intenso que se ha dado un buen batacazo en Gran Canaria. A veces los técnicos encuentran su sitio y momento adecuados, o todo lo contrario. “Los protagonistas son los que meten las canastas. En lo que sí puedo incidir es en decirles las verdades en las que pienso. Al jugador se lo transmito igual y no le miento. Ellos son los que han cambiado la mentalidad y los que han provocado que el equipo pueda ganar. No es una cuestión del entrenador, lo tengo claro”, destaca el segoviano.
Ponsarnau regresa mañana a la pista aragonesa esta vez como visitante, con el Bilbao Basket. Fiel a su espíritu sereno y conciliador, no le guía ningún afán de venganza. “Vuelves a un sitio donde trabajaste, no acerté en cosas, estas salieron mal. Es la vida del entrenador, puedo volver, he proseguido y estoy en un sitio en el que me encanta trabajar, con un grupo fantástico, seguimos trabajando en la onda”, resume en la previa del partido. “Es un sitio donde resulta muy difícil que al entrenador le salgan las cosas bien, ahora hay un técnico que ha tenido éxito. Máximo respeto a la gente que trabaja allí, le aprecio, no tengo que opinar de estas cosas, lo que me vale ahora es respeto a mis jugadores y el equipo”.
El preparador del equipo maño ha elogiado la figura de Ponsarnau, del que ha resaltado que es “uno de los mejores entrenadores españoles del momento y de los últimos años”. “Es una persona con un concepto del trabajo al cual me gusta a veces imitar y copiar ciertas cosas porque tiene mucho sentido de la realidad, de hacer las cosas con criterio y creo que es un persona, no solo a nivel deportivo sino humano, entrañable”, ha subrayado. Porfirio Fisac ha valorado que los equipos de Ponsarnau se caracterizan “por la confianza que tienen los jugadores con él” y ha apuntado que el técnico catalán es “uno de esos entrenadores ejemplares a la hora de hacer baloncesto”, algo que está demostrando con Bilbao y con muchos equipos.
Por su parte, el de Tàrrega valora que el Zaragoza ahora “está en buena dinámica”, no solo por las dos últimas victorias, ante Betis y Real Madrid, sino por el partido contra el Joventut en Badalona, “en el que mostraron un buen nivel competitivo”. “Han encontrado más inspiración, jugadores, acierto y energía, y es un equipo con calidad; eso les convierte en más peligrosos, tenemos que hacer las cosas muy bien si queremos competir”, agrega el preparador de los ‘hombres de negro’. Según analiza, Jessup ha dado un paso adelante y es su líder anotador, Radoncic y Hlinason están más cómodos en el juego, Javi García ha encontrado la aportación y Yusta no lo estaba haciendo bien y en el último partido fue determinante. “Tenemos que respetar a los 12 que tienen. A Mara y Langarita he tenido el placer de entrenar, tienen un talento impresionante, debemos tener mucho respeto y atención”.
Ha sido una semana buena positiva, tras venir de victoria ante el Fuenla y tener a todos los efectivos, a pesar de algunos pequeños percances. “Vamos creciendo como equipo, tenemos una propuesta, lo que pasa es que también sabemos que jugamos una competición que lo que hayamos mostrado que nos sale bien, tenemos que crecer porque en el momento que te paras, cualquier equipo te puede ganar. Estábamos en una dinámica negativa, y de haber perdido un partido en Miribilla (ante el Baskonia) y no queríamos que fueran dos, ahora tenemos esta dinámica fuera, tratamos de cambiarla, aprender a ser competitivos fuera sin nuestro publico, aunque esta vez también vamos a tener el público a favor”, esgrime en alusión a los 250 aficionados que viajarán a la ciudad del Pilar y a los tropiezos ante Granada, Breogán y Tenerife a domicilio.
Además, el Bilbao Basket llega a 600 partidos en ACB. “La victoria sería un muy buen reconocimiento a toda la gente que ha hecho posible esta historia. Por ejemplo, este pabellón (en alusión a La Casilla, donde se ha ejercitado estos días el Bilbao Basket), aquí se han jugado muchísimos partidos de esta travesía, forma parte de ella, de una historia bonita, entrañable e ilusionante. Es sólida, donde ha habido superéxitos, se ha estado en la LEB, se ha vuelto a subir... muchas cosas de volverse levantar que hacen más consistente y fuerte la historia de este club, con esta fuerza le quedan muchos años”.
Fisac, por su parte, ha explicado que siempre ha pensado que con la verdad se va a todos los sitios aunque a veces esa verdad duela o pueda hacer daño a nivel personal, algo que dice haberle ocurrido en algunas ocasiones. El técnico del conjunto ‘rojillo’ opina que el equipo tiene que seguir con el grado de humildad que está mostrando porque aunque pelea bien sigue estando “lejos” de ser un equipo como le gusta, “sólido y estable”. “Creo que todavía nos quedan muchas cosas por alcanzar y hay demasiados atisbos de ciertos egoísmos dentro del grupo, algo que por otra parte es normal por la juventud y ambición del equipo y lo que tenemos mque conseguir es llegar a ser todavía mucho más competitivos”, ha apuntado.
Sobre este aspecto ha aclarado que ese grado de egoísmo no es negativo sino positivo en el sentido de que los jugadores quieren sumar para el grupo y de que están cambiando un poco la mentalidad que tenían. “Cuando estás más ahogado hay jugadores que quieren salir y tirar del carro y sumar pero lo hacían de una manera equivocada”, ha analizado. El técnico de Fuenterrebollo opina que las dos victorias conseguidas de manera consecutiva tras el mal inicio de competición suponen que los jugadores crean “un poco más en sí mismos” y que eso es bueno siempre que no se convierta en exceso de confianza.
“No podemos olvidar dónde estamos, en la parte baja de la tabla, que nos queda mucho camino que recorrer y que aquí solo hay una forma de ganar, con el máximo esfuerzo y sacrificio, y si alguno se cree más de lo que es para eso estoy yo, para decírselo”, ha avisado. A este respecto ha apostillado que espera que sus jugadores no se confundan porque el Surne Bilbao es mejor equipo que el Casademont en estos momentos. “Tiene más victorias, está jugando mejor y lleva más partidos siendo sólido. Ellos están demostrando en la pista que son superiores. Tenemos un reto importante de ver si podemos acercarnos a ellos”, ha asegurado. Fisac considera que el partido frente al conjunto vizcaíno será complicado porque es un rival que juega bien y que en las dos competiciones en las que está tomando parte está haciendo “muy buen trabajo” con jugadores que están rindiendo “a muy buen nivel”. Uno de los aspectos que considera clave para la suerte del partido es el ritmo de juego que en Bilbao lo marcan sus dos bases, Hakanson y Radicevic, y que consiguen que sea “muy estable”.
“Ellos juegan a dos ritmos muy importantes. Creo que va a ser muy importante el control del ritmo porque ellos tienen una capacidad de jugar tanto a un ritmo de transición ofensiva como a otro estático con ideas muy claras y con capacidad para anotar fácil. Tienen un poder anotador muy alto y ahora mismo están en grandes porcentajes. Sabemos que hay que trabajar muy bien defensivamente para reducir eso y que no tiren tan cómodo”, ha analizado.